Pasadas las 13.30 horas de este jueves el puente de A Milagrosa de Carballo abría de nuevo al tráfico rodado tras siete meses cerrado por las obras de remodelación de Augas de Galicia. Aunque en un principio la empresa había anunciado al Concello que los coches podrían empezar a circular a partir de las 12, la retirada de las vallas y del resto del material de obra retrasó más de hora y media la apertura. En realidad, se retrasó un día, por la visita de un técnico de la Xunta.
Tras retirarse todos los obstáculos, los primeros coches fueron tímidamente pasando por el puente, pero unos minutos después el tráfico ya era tan fluido como antes del cierre, suponiendo todo un alivio a la presión que el tráfico carballés ha sufrido desde el mes de abril debido a las restricciones impuestas por las obras.
La calzada del puente está completamente finalizada, incluso con la señalización y las plazas de zona azul pintadas. También están completamente acabadas las aceras, más amplias que las anteriores. No obstante, ayer seguían las vallas de plástico para separar la calzada de la zona de peatones.
Aunque el puente ya está abierto, los trabajos aún no han finalizado. Ahora, las máquinas y los operarios trabajan en la zona del paseo fluvial, donde tendrán que acabar el paseo y los accesos al puente, desde la parte baja, tanto en la zona del bosque como en la del parque de San Martiño.
Para las rampas que permitirán subir hasta el puente se están construyendo unos muros de piedra. De hecho, uno de los accesos se está ejecutando en el sitio que hasta marzo ocupó el edificio que invadía el cauce. A estos trabajos aún le quedan unas cuantas semanas.