El agua de la traída municipal de Malpica aún no es apta para el consumo. Así lo confirmaron este jueves Augas de Galicia y la Consellería de Sanidade al alcalde Eduardo Parga, en la reunión que mantuvieron en Santiago. Los resultados de las analíticas realizadas por Sanidade confirmaron los que ya manejaba el Concello: hay una evidente reducción de los niveles de trihalometanos, pero todavía no es suficiente para dar vía libre al consumo. Concretamente, hay unas zonas en donde los valores ya están dentro de lo recomendable, pero en otras siguen por arriba de lo permitido “polo que aínda non pode autorizarse o consumo”, señalan fuentes municipales.

Tras la reunión indicaron desde el Concello que este viernes se volverán a hacer análisis del agua en las zonas en los que los parámetros mejoraron “para comprobar se continúa a dar valores correctos cando xa teña o cloro suficiente, xa que estes días estivo purgándose a rede e, ao volver a dar subministro para tomar as mostras, o cloro non era suficiente. Despois, se todo está correcto, valorarase a posibilidade de ir abrindo a auga por zonas”. 

En donde más han bajado los parámetros de contaminación es en la capital municipal y localidades del entorno, algo que tampoco puede sorprender demasiado ya que cuando se difundió el bando alertando de que el agua no era potable (a última hora de la tarde del sábado) los niveles de trihalometanos en el depósito principal de Pedra Queimada ya estaban por debajo del tope máximo permitido por las autoridades sanitarias (100 microgramos por litro), y el problema de contaminación seguía centrado en la red, que hubo que seguir purgando.

Plan de acción

En la reunión también se abordaron las opciones para evitar que vuelva a ocurrir esta situación. Se estudiaron diferentes actuaciones que incluirá el Concello de Malpica en el plan de acción en el que ya está trabajando. Este plan municipal incluirá mejoras en la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP), específicamente cambiar el arenero para mejorar la filtración, sustituir el equipo de cloración, hacer limpiezas más frecuentes de los depósitos y, a largo plazo, reformar el decantador o construir uno más grande a mayores. 

En el encuentro participó, además del regidor, la jefa territorial de Sanidade, Cristina Pérez; la directora xeral de Sanidade Pública, Carmen Durán; el gerente de Augas de Galicia, Gonzalo Mosquera; el jefe de sección Ambiental, Francisco Malvido; el jefe de servicio, Álvarez Cortiñas; y los técnicos municipales encargados del control de calidad del servicio de agua de Malpica.

Mientras tanto, el Concello de Malpica seguirá repartiendo agua potable en las parroquias o directamente en la Casa do Concello a quien pase a retirarla. Este viernes, el dispositivo de reparto por las parroquias se realizó en Seaia, las unitarias de Beo, el campo de la fiesta de Mens, la iglesia de Santirso, el campo de la fiesta de Cerqueda, la casa de los vecinos de Leiloio, y el campo de la fiesta de Cambre.