La XXXIX Mostra da Olería de Buño abría ayer sus puertas en un acto sencillo sin la habitual presencia de autoridades, pero muy emotivo. Jesús Mourón Varela, un oleiro casi centenario -el 20 de enero cumplirá los 100 años- fue el encargado de cortar la cinta que marca el inicio de la feria y se convirtió en el gran protagonista de la jornada. A sus 99 años cuenta con buena salud, una memoria prodigiosa y mantiene intacto su amor por la olería y la Mostra.
En su juventud, siendo un maestro artesano al torno era la “época dorada de la olería”, tal como subrayó el presidente de la Asociación Oleira de Buño, Antonio Pereira, O Rulo, durante el acto de apertura. Entonces se contabilizaban 114 alfareros en la localidad y hoy apenas quedan una docena, que luchan por mantener vivo este oficio centenario.
Esta edición sirve precisamente para ensalzar y promocionar la olería de Buño, centrada únicamente en la alfarería, mostrando las piezas tradicionales pero también otras modernas e innovadoras. En la plaza Luciano García Alén hay nueve casetas de venta de los oleiros y también la carpa habitual donde se exponen las piezas de los alfareros y el lugar donde se llevarán a cabo las exhibiciones estos días.
La feria comenzó con una foto de familia de todos los artesanos y colaboradores en las escaleras de la plaza, para continuar con un pequeño discurso de Jesús Mourón, quien llegó a Buño sin saber que él sería el principal protagonista y encargado de cortar la cinta. “Eu fun oleiro”. “E un bo oleiro”, apostilló en su discurso. Entonces el trabajo era muy diferente al de ahora y la unión entre el sector era lo primordial, tal como recordó.
Jesús Mourón expresó su satisfacción porque continúe la tradición oleira en esta localidad, puesto que fue el medio de vida durante muchos años. “Eu agora son moi maior, pero estou moi contento de ver a olería a esta idade”, subrayó. “Viva Buño e a miña terra! Viva o noso pobo!”, exclamó el antiguo oleiro, recibiendo los aplausos de todos los presentes. La Asociación Oleira lo obsequió con un cuadro suyo de joven trabajando en el torno.