El equipo de la Guardia Civil de A Coruña especializado en materia de Ciberdelincuencia desarticuló un grupo criminal especializado en estafas por internet e investigó a tres personas por la estafa de 50.000 euros a un hombre residente en Frades (A Coruña).

Por este delito, la Guardia Civil inició la investigación contra un vecino de Jerez de la Frontera, otro de Valencia y un tercero de Segovia en la fase de explotación de la operación Vaseca.

Los hechos ocurrieron a raíz de la denuncia interpuesta por un vecino de Frades (A Coruña) en las dependencias oficiales de la Guardia Civil de Sigüeiro en el mes de mayo del año pasado.

En la denuncia, el afectado comunicaba que una trabajadora de una supuesta empresa de inversión se había puesto en contacto con él ofreciéndole la posibilidad de invertir en criptomonedas, obteniendo una alta rentabilidad.

Ante esta oportunidad, el perjudicado transfirió una pequeña cantidad de dinero para comprobar que las cifras de rentabilidad eran ciertas, tras conocer los supuestos beneficios obtenidos, la víctima realizó otras cuatro transferencias alcanzando la inversión un importe total de 44.355 euros.

Sin embargo, cuando solicitó el ingreso de los beneficios en su cuenta bancaria, la supuesta empresa le dio “disculpas y excusas para no realizar el mencionado abono”.

Transcurrido algún tiempo, se volvieron a poner en contacto con él, indicando que, para la recuperación de las ganancias, las cuales supuestamente ascendían a 172.000 euros, debía efectuar un ingreso de 10.000 euros para la liquidación de impuestos, realizando la víctima la transferencia solicitada.

Transcurrido el tiempo sin recibir el ingreso, intentó ponerse en contacto con la supuesta empresa, no logrando contactar, momento en el que se dio cuenta de que había sido víctima de una estafa.

La Guardia Civil investigó los hechos y verificó la existencia de la estafa, “la cual se efectuó por el método conocido como estafa de la inversión”, que consiste en ofrecer a la víctima la posibilidad de realizar una inversión, “garantizándole una rentabilidad desorbitada, engañando y presionando a la víctima de que dicha oportunidad es efímera y solo la podrá aprovechar realizando inmediatamente la inversión”.