"Cosmética, honestidad, ciencia y un poquito de petardeo". Así se resume Cosmetocrítico, la marca personal de Héctor Núñez, farmacéutico y divulgador especializado en cosmética que se popularizó en 2019 gracias a su peculiar estilo, haciendo gala de un humor ácido que ha pasado a caracterizarle, y a la rigurosidad de sus recomendaciones. Con esta fórmula, Cosmetocrítico ha sabido conectar y ganarse la confianza de una audiencia cada vez mayor que crece imparable en la red.
Ahora lo hace también a través de su nuevo libro, Manual de cosmética aplicada, que lleva como subtítulo la máxima: "Belleza #sinfiltros". Se trata de una guía detallada y contundente, sin filtros y desarrollada en un lenguaje apto para todos los públicos. Ideal para entender qué ingredientes son importantes en cosmética, cuáles son los más beneficiosos para la piel según la edad y características, y cómo crear, desde la comprensión y el conocimiento, una rutina cosmética adaptada a las necesidades específicas de cada uno.
Un libro para dejar de comprar productos milagro y apuntarnos a cada nueva moda beauty y aprender realmente y desde dentro cómo funciona nuestra piel y qué le sienta mejor. Cosmetocrítico propone las herramientas pertinentes y la perspectiva crítica impres- cindible para aprender a cuidar nuestra piel y la de quienes nos rodean de acuerdo con las necesidades y demandas personales, no con las modas o soluciones milagro que nos invaden continuamente mediante la publicidad.
Como para entender algo hay que conocer las bases, el libro comienza hablando de la piel. El autor propone un viaje en el tiempo para ver qué le sucede cuando envejecemos, cómo afecta la menopausia o si existen diferencias entre la piel de los hombres y la de las mujeres, sin olvidarnos de las que son sensibles ni de las rojeces. Entenderemos qué es un cosmético, si existen los «cosmecéuticos» o son unicornios, y también aborda en estas páginas la cuestión de si es útil que te informen de las concentraciones de ingredientes o si la regla del fenoxietanol es una castaña pilonga. Una vez superado el desfiladero de las Termópilas viene lo divertido: Cosmetocrítico nos enseña lo que hay que saber para establecer nuestra propia rutina. Si después de leerlo aún no nos queda claro, Cosmetocrítico nos indica cuál necesitamos. Pero ojo, mejor no coger el atajo e ir directamente a ese punto, porque en todos los capítulos se incluyen consejos y curiosidades que ayudarán a establecer nuestra rutina ideal de una vez por todas.
El cierre del libro se centra en el melón que nunca ha abierto nadie y del que poco se habla: el cuidado corporal. Desde la celulitis hasta el sobaco, no queda en estas páginas ni un solo centímetro sin tocar. No encontraremos balsas de aceite o verdades que se ajusten a lo que a cada uno le interesa. Cosmetocrítico va a por todas, caiga quien caiga.