“El fútbol no entiende de justicias”. José Luis Lemos, entrenador del Bergantiños considera que su equipo mereció más en el partido de la primera jornada de liga –no gana desde hace 16 temporadas– ante la Gimnástica de Torrelavega.
 

Lemos explicó que “en el primer tiempo estuvimos muy bien hasta el primer gol. No sé si para sentenciar, pero si para ponernos por delante con una buena ventaja. El 0-1 nos hizo demasiado daño y no podemos permitirnos encajar otro al filo del descanso porque quedaba mucho partido por delante y tenemos argumentos para poder igualarlo o remontarlo. Con 0-2 todo es más complicado”.
 

Sobre la segunda mitad, el míster del Bergantiños señaló que “el partido estuvo condicionado por el estado del campo y tuvimos que acumular muchos futbolistas por delante del balón y jugar muy directo corriendo riesgos atrás. Fuimos capaces de hacer el 1-2 quedando muy poco tiempo para el final y, en la última jugada del partido, hay un penalti clarísimo y que podía ser una opción para empatar”. En resumen, Lemos comenta que “perdimos tres puntos por eficacia del rival pero no me parece un resultado justo. Ya sabemos que el fútbol no entiende de justicias”.
 

En el descanso, Lemos se dirigió a sus futbolistas y les dije que “a veces, en el fútbol, el resultado no se corresponde con lo que se ve en el campo. Sería criticable un 0-2 en contra si no estuviésemos haciendo las cosas que teníamos que hacer, pero lo estábamos haciendo bien teniendo el balón, llegando al área rival, teniendo cuatro ocasiones clarísimas. Había que insistir porque en los partidos hay momentos complicados. Fue en la primera jornada cuando nos vimos con un revés cuando hacíamos las cosas bien, pero había que intentarlo hasta el final como creo que lo hicimos", detalla.
 

La lectura positiva es que "el equipo tiene capacidad para tener control pero, con ese control, es capaz de ser profundo y llegar mucho al área. La primera media hora fue muy buena y, desde fuera, estábamos muy contentos con lo que estábamos viendo”.
 

Lemos está gafado en cada inicio de competición. “No me pilla por sorpresa. Llevo 16 temporadas sin ganar el primer partido de liga. Es una forma que tengo de empezar los campeonatos y tampoco pude romper la racha este año. Hay que pensar ya la segunda”, aclara.
 

Por último, detalló que “nos adaptamos a algo que no teníamos ni trabajado, el fútbol tan directo cuando el campo ya no permitía otra cosa. Lo intentamos hasta el final”.