El Bergantiños logró una importantísima victoria ante el Fabril en la noche del pasado miércoles (2-1), que le permite alejarse de los puestos de descenso, con los que ya tiene un colchón de 10 puntos.
La trascendencia del triunfo ante el filial deportivista radica también en que permite dejar atrás, al menos de forma momentánea, la falta de confianza que empezaba a atenazar a los jugadores rojillos cada vez que tenían que jugar en As Eiroas, de donde se escaparon en lo que va de liga un buen número de puntos.
El propio entrenador del Bergantiños, Jorge Cuesta, apuntaba en esa misma dirección en la rueda de prensa que ofreció con posterioridad al partido. “Supongo que estos 3 puntos nos darán un poco más de tranquilidad y espero que sirvan también para limpiarnos la cabeza de cara a los siguientes partidos en casa, empezando por el del próximo domingo ante el Rayo Cantabria”, declaró el técnico vigués.
Cuesta vio “un partido muy igualado, en el que no conseguimos tener mucha posesión de balón, en parte también porque el Fabril presionó muy bien y sus jugadores mostraron ese punto de agresividad en la presión que otros equipos no tienen”.
Pese a todo, considera que los fabrilistas vivieron “de nuestros errores, sobre todo de los que cometimos en el área propia, por cuanto tanto en este encuentro como en otros muchos, cada balón que nos meten dentro se convierte en una ocasión para el rival de turno”.
Por ello, y a pesar del refuerzo anímico que supuso ese 2-1, cree que queda mucho trabajo por delante. “En el apartado defensivo tenemos mucho que corregir y mejorar. Ante el Fabril nos salió cara, pero lo normal es que muchas veces salga cruz, sobre todo cuando se cometen errores tan graves y de forma tan continuada. Atrás concedemos mucho con nada, de hecho ante los fabrilistas tres saques de banda a nuestro favor se acabaron convirtiendo en saques de esquina en contra”.
Siguiendo esta misma línea argumental, el preparador también llama la atención sobre el hecho de los 21 goles que llevan encajados en las dieciséis jornadas que van disputadas, “bastante más de la mitad llegaron de penalti, faltas o córneres”, por lo que toca mejorar la defensa de las acciones a balón parado de los equipos rivales.
Tras la jornada de descanso de este jueves, el Bergantiños vuelve el viernes al trabajo para empezar a preparar el partido del domingo en As Eiroas (17.30 horas) ante el filial del Rácing de Santander.
Los cántabros son séptimos en la liga con 24 puntos, uno más que un Bergantiños que es noveno. Ambos equipos son los más goleadores del grupo, con 27 tantos cada uno en 16 jornadas.
Cuesta reconoce que su equipo cuenta con buenos pasadores y rematadores y espera seguir viendo puerta con facilidad, empezando por la cita del domingo.
Ganar supondría para los carballeses volver a la parte alta de la tabla y seguir reforzando la confianza del plantel. De todas formas, apunta que estamos ante una liga muy igualada y difícil, en la que dos derrotas o dos victorias seguidas te estancan abajo o te disparan hacia arriba en la tabla.
“Tenemos que ser conscientes de dónde venimos y que nuestro objetivo es salvarnos, por lo que vamos a estar toda la temporada mirando hacia arriba o hacia abajo, según el momento”, concluye.