El empate del pasado domingo ante el Llanera (2-2) ha dejado muy mal sabor de boca entre los aficionados del Bergantiños. Y es que a los rojillos todo se les puso a pedir de boca con dos goles de los llamados ‘pisicológicos’ que llegaron justo al filo del descanso y nada más empezar la segunda mitad.
Pero todo se complicó en los últimos diez minutos y dos penaltis evitables dieron al traste con la ilusión carballesa de conseguir la segunda victoria del curso.
En la comparecencia de prensa posterior al partido el entrenador del Bergantiños, Jorge Cuesta, no rehuyó la autocrítica, sino todo lo contrario. “Hicimos dos buenos partidos ante equipos potentes como Áviles y Numancia y eso creo que nos confundió a la hora de tener que enfrentarnos a conjuntos de nuestra propia liga”, apunta el técnico a la hora de buscar posibles explicaciones al inesperado traspiés sufrido ante el equipo asturiano.
Cuesta va incluso más allá al afirmar que “el elogio nos debilitó”. Sobre el particular añade: “Sacando los 3 ó 4 de arriba, la energía y las ganas de ganar que ponen el resto de equipos son superiores a la nuestras, tal vez por los halagos de aquellos que dicen que somos muy buenos”.
El partido ante el Llanera, según él, ha supuesto “un golpe de realidad para nosotros. Tenemos que darnos cuenta de dónde venimos, somos un equipo recién ascendido y si hacemos las cosas bien podemos tener un año divertido, pero para ello hay que ser consciente de que sumar ante cualquier rival cuesta un mundo en una categoría tan igualada”.
Sobre el choque en si ante el conjunto asturiano, el preparador cree que, pese a no jugar bien, fue un partido en el que el Bergantiños debió sumar los 3 puntos en juego.
“En un encuentro incómodo, en el que íbamos 2-0 por situaciones puntuales en las que acertamos. Era un partido en el que no estaba pasando nada hasta que llegó el primer penalti y en el que parecía que incluso podíamos ampliar la renta en alguna contra, pero al final tiramos todo por la borda”.
Cuesta cree que el primer gol del Llanera lo cambió porque con 2-1 al Bergantiños le entró miedo a perder y a los visitantes les dio alas.
“Lo sucedido nos tiene que servir para aprender, pero sin volverse locos”, concluye el técnico
El plantel rojillo retorna hoy a los entrenamientos tras el varapalo sufrido el pasado domingo.
Como es habitual, el plantel completará cuatro sesiones preparatorias a lo largo de la semana.
El domingo los carballeses visitarán uno de los campos históricos del balompié nacional, el Helmántico salmantino.
Los locales marchan séptimos con 8 puntos (2 más que los carballeses) luego de 2 partidos ganados, 2 empatados y 1 perdido.