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jueves | 13 febrero | 2025
El Concello de Carballo está llevando a cabo varios proyectos de modernización urbana centrados en los parques infantiles en los que invertirá más de 1,4 millones de euros. Son proyectos de renovación con los que dará un cambio a los tradicionales espacios para la infancia que hay en el municipio.
La particularidad de este proyecto que está en licitación radica en el enfoque temático personalizado para cada parque, adaptando los elementos de juego a las características y simbolismos de cada ubicación, en los que el trolebús, los depósitos de agua de O Chorís y los propios carballos, serán los protagonistas. Además de dotar de identidad a cada parque, uno de los objetivos principales de este proyecto es mejorar la accesibilidad y la inclusión en los parques infantiles. Se instalarán elementos que permitan el uso y disfrute por parte de niños con capacidades diversas, garantizando el cumplimiento de la normativa vigente en materia de seguridad en espacios de juego al aire libre.
Una de las ideas más llamativas y atractivas de este nuevo concepto de zonas infantiles se llevará a cabo en el parque de Rego da Balsa. Por estar en el ámbito de la antigua estación, el diseño temático girará en torno a la historia del trolebús, un medio de transporte que marcó una época en Carballo al operar la línea Carballo-Coruña entre 1950 y 1971. El objetivo es crear un espacio lúdico que rinda homenaje a este histórico vehículo, integrando elementos que representen las distintas etapas y símbolos asociados a su recorrido.
La renovación del parque incluirá la ampliación de la zona de juegos para dar cabida a un mayor número de usuarios y atender a un rango de edad más amplio. Se instalarán juegos infantiles diseñados específicamente para este espacio, combinando elementos de producción estándar con otros de fabricación exclusiva.
Entre los elementos destacados se encuentra una reproducción del trolebús modelo MAN AEG, el primero en operar en la línea. Esta estructura, que será el elemento central del parque, medirá aproximadamente diez metros de longitud, cinco metros de ancho y casi cinco metros de altura. El interior del trolebús estará equipado con paneles interactivos, asiento de conductor, salpicadero de mando y otros detalles que permitirán a los niños sumergirse en una experiencia de juego única.
Además, se incorporará una representación simplificada del recorrido del trolebús, desde la cascada de Entrecruces hasta A Coruña, incluyendo referencias a la minicentral hidroeléctrica de San Paio y otros puntos emblemáticos. Otros juegos como una tirolina metálica de 15 metros, un carrusel accesible y fachadas que representan el skyline de Carballo complementarán la oferta lúdica del parque.
La iluminación LED será un componente importante en el diseño, permitiendo que el parque pueda ser disfrutado también en horario nocturno y realzando el carácter monumental de los elementos instalados.
En la Praza do Outeiro, la temática del parque girará en torno a los carballos, que son característicos de la plaza. El elemento central será una gran estructura en forma de árbol, denominada ‘Juego Carballo’. Este juego tipo torre estará diseñado para usuarios de entre 4 y 14 años, con capacidad para al menos 20 niños jugando simultáneamente. Con una altura mínima de más de seis metros, la estructura contará con funciones lúdicas de trepa, escalada, deslizamiento y paneles interactivos. La copa del árbol estará formada por poliedros semirregulares, proporcionando una apariencia geométrica atractiva. En su interior, redes trepables fabricadas con cuerdas de poliamida de alta resistencia permitirán a los niños escalar y explorar de manera segura.
El diseño del parque incluirá elementos de madera y pavimentos con formas y colores que evocan la naturaleza, buscando una integración armoniosa con el entorno y reforzando la identidad del municipio de Carballo.
El Parque do Chorís verá ampliado su equipamiento infantil con un enfoque temático centrado en el agua, en consonancia con los depósitos que caracterizan el barrio. El elemento principal será una impresionante torre que representa el depósito de agua más grande de la zona. Esta estructura, con una altura mínima de casi nueve metros, estará diseñada para usuarios de entre 4 y 14 años, permitiendo que al menos 28 niños puedan jugar simultáneamente. La torre contará con varios niveles y plataformas equipadas con funciones lúdicas como trepa, escalada, deslizamiento y paneles interactivos.
Los toboganes tubulares de acero inoxidable descenderán de los niveles superiores en forma helicoidal, simulando las escaleras de acceso a los depósitos de agua reales. La fachada de la torre, con gran transparencia y acabado en chapa perforada, permitirá una integración visual con las estructuras existentes en el barrio. Al igual que en Rego da Balsa, la iluminación LED será un elemento clave, permitiendo el uso del parque en horario nocturno.
