El Concello de Carballo y la Diputación de A Coruña impulsan un proyecto piloto de vivienda ecológica en alquiler social en el municipio carballés con el objetivo de que se pueda replicar en el resto de la provincia. Para hacerlo posible, ambas administraciones formalizaron ayer un convenio de colaboración para destinar un total de 94.967 euros a sufragar los costes totales del proyecto, de los cuales la Diputación se comprometió a financiar 70.967 euros con fondos propios (el 74,73% del total), mientras que el Concello de Carballo aportará los 24.000 euros restantes (el 25,27%).
Para formalizar el acuerdo acudió a la sede provincial el alcalde, Evencio Ferrero, que se reunió con el presidente de la Diputación, Valentín González Formoso, el vicepresidente y también concejal carballés Xosé Regueira y el diputado responsable del área de Empleo, José Ramón Rioboo.
Para la ejecución de esta vivienda ecológica se seguirán los estándares de la “passivhaus”, un diseño constructivo que busca reducir al máximo el consumo de energía necesaria para la climatización del inmueble, logrando mantener el ambiente a una temperatura constante y confortable durante todo el año, mediante la optimización de los recursos existentes.
Es un tipo de vivienda que poco a poco se va haciendo un hueco en el mercado inmobiliario y se estima que actualmente hay unas 300 viviendas de este tipo a nivel nacional, una de las cuales estará en Carballo.
Antes de poner en marcha este proyecto que será pionero en la provincia, se encargó un estudio de viabilidad que fue elaborado por un equipo dirigido por la arquitecta Marta Trigás, profesional que desarrolla su actividad en uno de los espacios coworking de la Diputación.
En este estudio se valoraron aspectos sociales y de la geografía humana, como la densidad de población, la existencia de demandantes de vivienda en la zona, vivienda desocupada, entre otras cuestiones y que concluyó que el “ámbito proposto é unha localización idónea para a posta en marcha dun proxecto piloto de vivenda pasiva, tendo en conta tamén o modelo de desenvolvemento urbano sustentable que está a asumir e que o postulan como un exemplo a seguir por outros concellos da contorna e da provincia, en termos de mobilidade, accesibilidade e inclusión”, señalan desde el ente provincial.
Por el momento, ni la ubicación exacta en el término municipal de esta vivienda pasiva de alquiler social ni los plazos para su ejecución y puesta en marcha han trascendido.
No será el único proyecto de este tipo que impulsará la Diputación. Según afirmaron ayer, a la de Carballo le seguirán otras actuaciones por toda la provincia tras el estudio de las diferentes propuestas, promoviéndose la construcción pasiva en la rehabilitación en el rural y en los espacios urbanos.
Desde la Diputación ya avanzan que a Carballo le seguirá previsiblemente Culleredo, que ya mostró su interés en llevar a cabo este tipo de actuaciones en su término municipal.