La Consellería de Infraestruturas e Mobilidade ensaya un sistema de recopilación de información sobre el estado de ríos y masas de agua a través de la utilización de drones que sobrevuelan los cauces de la demarcación hidrográfica Galicia-Costa.

El sistema está siendo testado en la ribera del río Anllón, en la comarca de Bergantiños, donde se despliegan estos días los aviones no tripulados para recabar información sobre el estado de las aguas en la zona.

Según explica este sábado la Xunta en un comunicado, se emplean drones con tecnología LIDAR para recopilar datos que posteriormente servirán para trazar parámeteros hidromorfológicos del río, como la identificación de obstáculos, la vegetación de los márgenes o qué tipo de presiones le pueden afectar.

El uso de aviones no tripulados facilita la recabación de datos que, hasta ahora, recogen 'in situ' los técnicos de Augas de Galicia a través de campañas de trabajo sobre el terreno.

De este modo, los drones son capaces de alcanzar zonas de difícil acceso para las personas, además de otorgar una perspectiva "más global", lo que, según la Xunta, permitirá "una mejora sustancial, tanto en la calidad de las evaluaciones como en el tiempo de realización".

Esta acción se enmarca en el proyecto 'Innovaugas 4.0', impulsado por la Xunta con un presupuesto de 7 millones de euros procedentes en su mayoría de fondos europeos y que busca crear una infraestructura tecnológica a aplicar en el ámbito de la gestión de los recursos hídricos sobre la que asentar las decisiones "a corto, medio y largo plazo".

La iniciativa del uso de drones, a su vez, se enmarca en el primer reto de este proyecto, que llevan a cabo Viaqua, Xestión Integral de Augas de Galicia y la Fundación Instituto Tecnolóxico de Galicia y que está enfocada a recopilar datos de fuentes como los datos históricos de precipitaciones, predicciones, temperaturas o análisis de calidad de aguas.