Desde esta semana las empresas pueden solicitar su participación en el concurso del nudo de transición justa de Meirama, con el que se adjudicarán 220 kilovatios entre los proyectos que minimicen la afección ambiental y maximicen los beneficios socioeconómicos locales. Con motivo de la apertura del concurso, este jueves el vivero de empresas del polígono industrial de Cerceda acogió una jornada informativa sobre los detalles del nudo, en el que participó la directora del Instituto de Transición Justa, Judith Carreras, que visitó por primera vez Galicia acompañada por el delegado del Gobierno, Pedro Blanco y por el alcalde Juan Manuel Rodríguez.
Durante la jornada, Carreras destacó que el concurso del nudo de Meirama “va a revertir en beneficio del territorio”. “Vengo con un mensaje muy claro: el Gobierno de España está comprometido con la transición justa en este territorio y buena prueba de ello es que se han movilizado 120 millones de euros en casi 50 proyectos que van a movilizar más de 400 millones”, afirmó. Con respecto al concurso, aseguró Carreras que pondrán “a las empresas a competir” y que “aquellas que presenten los mejores proyectos son las que van a obtener el acceso a poder desarrollar las instalaciones de renovables y almacenamiento”.
Por su parte, el delegado del Gobierno recordó que “fue este Gobierno el que generó este instituto, justamente para cumplir las exigencias de la descarbonización y ser capaces de que no tuviera ningún tipo de impacto”, en referencia al cierre de la central térmica de Meirama. En este sentido, Blanco aseguró que “ lo estamos consiguiendo de una forma muy ordenada, sustituir ese empleo ocupado en esos centros”. El representante del Gobierno central en Galicia puso en relieve que “no se trata solo de mirar por Cerceda y As Pontes, sino también por los otros doce ayuntamientos que forman parte de la zona de transición justa”, entre ellos, el de A Laracha.
El alcalde auguró que este concurso convertirá a Cerceda en un municipio “de referencia” y pidió a los presentes “aprovechar esta oportunidad”. “Va a ser muy bueno para el territorio y va a hacer que ese cierre de la central que supuso una cierta catástrofe se palíe”, destacó Rodríguez.
Los que asistieron a las jornadas, pudieron conocer los detalles del concurso del nudo de transición justa. En primer lugar, se explicó que el objetivo es otorgar derechos de acceso a la red eléctrica a proyectos de renovables y almacenamiento que contribuyan a impulsar la actividad económica y el empleo en la zona de transición justa de Meirama, afectada por el cierre de la central térmica.
Además de priorizar aquellos proyectos que minimicen la afección ambiental invirtiendo en actuaciones de economía circular o de mejora de la biodiversidad, para la adjudicación del concurso que suma hasta 408 megavatios de capacidad, se valorarán los beneficios socioeconómicos para el territorio. En concreto, se tendrán en cuenta criterios como el fomento del empleo, especialmente para trabajadores excedentes de la central y mujeres; el apoyo a proyectos industriales, agrarios o sociales locales; la formación para residentes en la zona; el desarrollo de autoconsumo; las inversiones en la cadena de valor provincial y la participación de inversores locales.
Durante la jornada, la directora del Instituto para la Transición Justa explicó además que el concurso se suma a otros instrumentos de apoyo ya desplegados para la zona de transición justa de Meirama por parte del ministerio, como las ayudas a proyectos empresariales generadores de empleo, a pequeños proyectos de inversión, a proyectos energéticos innovadores y a proyectos municipales y de infraestructuras.
En total, el ministerio ha concedido 120 millones de euros de ayudas a 48 proyectos en las zonas de transición justa de Galicia, que movilizarán más de 434 millones de euros, según sus cálculos. Además, la directora ha anunciado que esta primavera se abrirán nuevas convocatorias de ayudas a proyectos empresariales y pequeños proyectos de inversión, a las que podrán presentarse proyectos en las zonas de transición justa de Meirama y de As Pontes.