Los Penedos de Pasarela y Traba, entre los concellos de Vimianzo y Laxe, constituyen el gran parque geológico de la Costa da Morte. Un museo al aire libre compuesto por numerosas formaciones granítica con formas humanas y de animales que ponen a prueba la imaginación de cada persona.
A Cachucha, O Cantor, A Tartaruga, A Aguia, O Coello, O Paiaso enfadado, A Aguia, O Bico, A Barca o A Dama da Costa da Morte son algunas de las figuras más célebres que se pueden encontrar en el parque. Algunas fácilmente reconocibles a primera vista y otras no tanto, pero que gozan igualmente del mismo encanto e interés.
El pasado domingo la Peña Barcelonista Irmandiña de Vimianzo organizó una ruta por este parque geológico, guiada por el catedrático emérito de la Universidade de A Coruña, Juan Ramón Vidal Romaní, quien explicó el origen de estas singulares formaciones, hace más de 300 millones de años y a varios kilómetros de profundidad. Una cifra difícil de imaginar para la treintena de participantes, que también disfrutaron con las actuaciones del trío Teté Teatro, una el primer escenario de salida y otra para concluir la Andaina. Teresa, Caridad y Sara recibieron fuertes aplausos de los asistentes, a los que hicieron reír con su gracia natural, aderezada con historias y leyendas de la zona.
Vidal Romaní por su parte abogó por la protección de estas formaciones graníticas, que conforman un lugar único. Una especie de ciudad encantada en plena Costa da Morte que merece un cuidado especial. “As paisaxes xeolóxicas consérvanse soas. Non fai falta que ninguén as estrague. E non se necesitan nin canteiras nin outra cousa...”, destacó el experto durante el recorrido.