El Partido Republicano formalizó este lunes, durante su convención nacional en Milwaukee, la nominación del expresidente de Estados Unidos Donald Trump (2017-2021) como su candidato para las elecciones del próximo noviembre.
Tan solo dos días después de haber sobrevivido a un intento de asesinato en un mitin, Trump fue coronado por los delegados del partido para ser el candidato republicano en los comicios del 5 de noviembre, en los que probablemente se batirá con el actual presidente, el demócrata Joe Biden.
Los cerca de 2.400 delegados que representan a los diferentes estados y territorios del país fueron entregando en bloque sus votos para Trump.
Cuando Eric Trump, hijo del exmandatario, anunció la entrega de los votos de Florida para su padre, se alcanzó el número necesario para formalizar la nominación y estalló una ovación al son de la canción de 'Celebration' de Kool & the Gang y Pat Boone.
Los republicanos deben nominar en los próximos minutos a su candidato a vicepresidente, el senador de Ohio J.D. Vance, cuyo nombre fue revelado hoy mismo por Trump en la red social Truth.
La Convención Nacional Republicana arrancó este lunes en Milwaukee con la nominación de Trump matemáticamente asegurada: necesitaba los votos de 1.215 delegados para tenerla y en el proceso de primarias se garantizaron los de 2.268.
Además, su rival en las primarias Nikki Haley, exembajadora de EE.UU. ante la ONU, liberó a sus 97 delegados para que pudieran votar por el exmandatario.
La unidad del partido en torno a la figura de Trump se ha estrechado todavía más desde que el republicano sobrevivió el pasado sábado a un intento de asesinato en un mitin en Pensilvania, donde resultó herido en una oreja por el disparo de un joven de 20 años que intentó acabar con su vida.
El expresidente estadounidense Donald Trump (2017-2021) eligió este lunes como su candidato a vicepresidente al senador de Ohio J.D. Vance, un joven de 39 años que además de político también es empresario y escritor.
A James David Vance (Ohio, 1984) lo definió recientemente el líder republicano como un "joven Abraham Lincoln" a quien hasta "la barba le queda bien".
El detalle, aunque pueda parecer nimio, dice mucho en este caso del respeto que Trump, de quien es vox populi que detesta el vello facial, profesa ahora por esta figura incipiente dentro del partido, que pasó de vivir un auténtico drama personal y servir como infante de marina en la guerra de Irak a convertirse en un escritor líder de ventas.
Mucho antes de llegar a senador por Ohio, J.D., como se le conoce popularmente, sufrió una infancia expuesto a la violencia, a las armas y al consumo de drogas en Middletown, su localidad natal en ese estado vecino de Pensilvania, donde el expresidente Trump recibió un disparo en la oreja derecha este sábado.
Su despiadada realidad era la de muchas familias blancas en ciudades manufactureras de EE.UU., en decadencia allá por la década de los noventa.