El presidente francés, Emmanuel Macron, pidió este martes que patronal y sindicatos alcancen un acuerdo sobre un nuevo pacto social "para el final de este año".
Macron inició hoy con una reunión con las organizaciones patronales su ciclo de encuentros que quiere incluir también a los sindicatos en busca de un acuerdo que devuelva la paz social al país tras la crisis política causada por la aprobación de la ley de reforma de las pensiones.
Antes del inicio de la discusión con los representantes patronales, el presidente afirmó que el objetivo es definir una agenda de las negociaciones "en las próximas semanas", lo que dejaría tiempo para negociar un acuerdo "para el final de este año".
Macron estuvo acompañado por la primera ministra, Élisabeth Borne, y el titular de Trabajo, Olivier Dussopt, entre otros altos cargos, en el inicio de una iniciativa con la que busca relanzar su segundo mandato, que se arriesga a quedar vacío cuando todavía le quedan cuatro años en el cargo.
Sin embargo, los sindicatos no han confirmado que vayan a participar en este proceso, después de que el Elíseo no respondió a sus repetidas demandas de una reunión con Macron para discutir la reforma de las pensiones.
Los sindicatos prefieren esperar al 1 de mayo, día internacional del trabajo, para el que han convocado una movilización masiva, para intentar convencer al Gobierno de que mantienen su fortaleza.
El segundo sindicato del país, CGT pidió hoy una asistencia "excepcional" a los eventos del 1 de mayo, para conformar "una jornada potente" que mantenga la exigencia de la retirada de la ley de las pensiones.
Tras el discurso televisivo que el presidente ofreció la pasada noche al país, y en el que aseguró que era consciente del "enfado" de los franceses que piden más justicia social, varios ministros aparecieron esta mañana en entrevistas.
El objetivo del Ejecutivo era reforzar el mensaje de Macron para tratar de calmar los ánimos con promesas sobre el poder adquisitivo, el reparto de la riqueza y mejores servicios de proximidad, como escuelas y hospitales.
"Restringir las preocupaciones de los franceses a la cuestión de las pensiones sería no entender nada", aseguró a la emisora pública Franceinfo el portavoz del Gobierno, Olivier Véran.
"El presidente ha reconocido muy claramente las inquietudes, las dificultades de nuestros compatriotas", aseveró por su parte el ministro de Economía, Bruno Le Maire, entrevistado por el canal BFMTV.