Ourense ha tenido un papel decisivo hasta la fecha en las mayorías absolutas del PP en Galicia. ¿Pero qué pasará el 18-F? El escenario parece más abierto del que se preveía.
La provincia de Ourense, que suma casi 364.000 electores, el 13,49 % de Galicia, reparte 14 de los 75 escaños en juego, de los que el PPdeG en esta provincia hasta ahora tiene 8, una cifra que la fuerza de Alfonso Rueda aspira a repetir o incluso superar el 18 de febrero, convencidos de que la provincia -junto a Lugo- volverá a ser decisiva.
El PPdeG parte de una posición de privilegio: en 2020 logró 83.016 votos y el 53 % de los votos y se hizo con 8 diputados, uno menos que Lugo, que con el 54,64 % obtuvo 9, resultado que busca el PP también para la provincia ourensana. En esta ocasión, el PP no cuenta por primera vez en la democracia con un Baltar en la presidencia de la diputación provincial.
El BNG, que se situó como segunda fuerza, superó los 31.000 votos con el 19,9 % y 3 diputados, los mismos que el Partido Socialista, que consiguió idéntica cifra y un 19,69% de votos, quedando relegada a la tercera posición.
La gran incógnita pasa por dos factores: la posible subida de la formación nacionalista presidida por Ana Pontón, que sigue en la tendencia de ascenso, y la irrupción de la organización independiente Democracia Ourensana, que preside el atípico alcalde Gonzalo Pérez Jácome, en el tablero político.
En los comicios de 2020, Democracia Ourensana no concurrió al proceso electoral tras llegar a un acuerdo con el PPdeG, dirigido entonces por el hoy presidente del PP nacional, Alberto Núñez Feijóo, y optó por pedir el voto para el dirigente popular.
Sin embargo, y tras los buenos resultados conseguidos en las municipales por DO, que se situó como primera fuerza política en la ciudad, su líder optó por competir con el resto, con el reto de conseguir su primer diputado autonómico.
Las últimas encuestas le dan un diputado a Democracia Ourensana, por lo que, de confirmarse este pronóstico, podría ser decisiva en la configuración de un hipotético gobierno. Para que esto suceda, el PP tendría que quedarse en los 37 escaños, a uno de la mayoría absoluta, y que DO saque uno en la provincia de Ourense.
Aunque los datos no son extrapolables, en las elecciones locales de 2023 DO obtuvo diez concejales sobre 27 tras obtener casi un 34% de los votos y más de 18.000 papeletas, cifra que esta formación cree que le permitiría luchar por ese objetivo.
Por el momento, Jácome, fiel a su filosofía, ha celebrado una campaña sin actos políticos pero sí con presencia en redes sociales y en el Entroido, como se conoce al carnaval gallego. Entre otras acciones, difundió un vídeo que se hizo viral versionando una canción de los Village People para pedir el voto para DO en la provincia. Tampoco pasó desapercibido tras aparecer disfrazado de astronauta, Power Ranger e incluso de Superman.
De cumplirse los pronósticos, el siguiente enigma podría ser saber a quién apoyará Jácome en una investidura.
Este político, que se define como "microliberal" y que dice no ser un hombre de derechas ni de izquierdas, no deja de repetir uno de sus mantras: "Pactaré con el diablo si con ello consigo el cielo para Ourense".
Hasta ahora su partido siempre ha pactado con el PP, tal y como sucedió en 2019, cuando DO y los populares llegaron a un acuerdo para mantener, respectivamente, el gobierno del ayuntamiento, él, y el PP el de la diputación provincial, dirigida en aquel momento por Manuel Baltar.
Por el momento, el PP espera, como mínimo, repetir los ocho escaños y que estos vuelvan a ser decisivos en una mayoría absoluta de Rueda.
El PSOE, por su parte, aguarda mantener los tres diputados que logró en 2020, mientras que el BNG se presenta a por todas pidiendo en esta campaña a los ourensanos votar "con las manos libres" para que la Xunta pueda tener su "primera presidenta", Ana Pontón.