La portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, ha anunciado este lunes que su grupo "no apoyará" la investidura de Alfonso Rueda como presidente de la Xunta porque desde el BNG no pueden "apoyar al secundario de Feijóo durante todos estos años".

En declaraciones a los medios tras reunirse con el presidente del Parlamento, Miguel Santalices, dentro de la ronda de consultas a los grupos sobre la candidatura a la Xunta, la líder del BNG ha sostenido que los 19 diputados con los que cuenta su formación en la Cámara votarán no a la elección de Rueda como próximo jefe del Ejecutivo, tras el cese a petición propia de Alberto Núñez Feijóo para centrarse en su trabajo como líder del PP.

“Va a ser el mismo voto que tuvimos con Feijóo, el no. Sería extraño que nos abstuvieramos” cuando Rueda ha sido el “secundario” en la Xunta durante los últimos 13 años y ha sido el número dos de un Gobierno "responsable" de dejar una Galicia "peor" que la que había en 2009.

La portavoz nacional del BNG ha insistido en que su partido no puede respaldar a quien también será próximamente el próximo líder del PP gallego puesto que el partido ha evidenciado que para el “Partido Popular lo primero siempre es el Partido Popular”.

Según Pontón, así lo han demostrado durante la actual “crisis de Gobierno” con la que han mantenido a Galicia durante tres meses con un Gobierno “interino” porque pesaban más “las ambiciones personales” que el futuro de la Comunidad que atraviesa “la mayor crisis de precios” de los últimos treinta años.

Por todo ello, la negativa a la elección de Rueda está motivada por “razones de peso y de sentido común”, ha asegurado.

Además, la líder del BNG ha mostrado su convicción sobre la apertura de “un nuevo ciclo político” en la que su partido será determinante puesto que aspiran a “liderar” la Xunta de Galicia mediante un proyecto de futuro basado en la “ilusión, la humildad y la ambición”.

“Empezó la cuenta atrás para esa Galicia con futuro”, ha proclamado Pontón, quien reiteró que el cambio de ciclo en Galicia se inició en la noche electoral de julio de 2020 cuando “miles de gallegos” situaron al BNG como “alternativa” al colocar a la formación nacionalista como principal partido de la oposición.