Las opciones del Bergantiños de poder acceder al playoff se evaporaron con la contundente derrota ante un Escobedo que se jugará la salvación en casa en la última jornada. El varapalo del conjunto rojillo, al que todo se le torció en el tramo final de la primera parte con la expulsión de Kensly, le deja también sin el sueño de poder jugar la Copa del Rey. Los visitantes salieron a por el partido. Avisaron con un chut alto de Picón. Y un disparo cruzado de Edu Fontán lo detuvo Santi Canedo con seguridad.
Al conjunto rojillo le costaba generar peligro y una falta al borde del área de Laro parecía una opción ideal para meter el miedo en el cuerpo a los cántabros. Sin embargo, Kensly golpeó el cuero contra la barrera y buscó el balón rechazado con una falta absurda e innecesaria que supuso su segunda amonestación y tener que dejar el encuentro en el minuto 36.
Con un hombre menos, el cuadro carballés vivió su mejor momento y disfrutó de dos buenas ocasiones para adelantarse en el marcador por mediación de Tiago y Tiján Sin embargo, ese buen momento del conjunto de Cuesta quedó cercenado por el 0-1. Laro jugó el cuero desde atrás y una buena combinación en el centro del campo con pase de Brayan habilitó la carrera de Aarón a la espalda de la zaga adelantada del Bergantiños, que reclamó un fuera de juego que no lo pareció. El atacante cántabro batió por bajo a Santi Canedo.
Con un hombre menos y el marcador en contra todo pintaba mal para el Bergantiños. Pero, ya en el tiempo adicional del primer acto, un golpeo de calidad de Marcos Remeseiro desde el costado izquierdo, en el saque de un córner en corto, lo completó Fito con un testarazo inapelable.
Pero el Escobedo se fue al intermedio con ventaja gracias a un balón en largo de Cagigal en el que falló estrepitosamente Cano, que trató de controlar el balón con el muslo. Gonzalo Peña le robó la cartera y fusiló desde cerca a Santi Canedo.
El inicio de la segunda mitad resultó tan negativo para el equipo de Jorge Cuesta como el cierre del primer período. En un saque de banda desde la derecha, Aarón ganó la línea de fondo y puso un pase atrás que la zaga del Bergan no supo despejar, lo que aprovechó Edu Fontán para anotar el 1-3. Cuatro minutos después marcó Cagigal el cuarto y todo quedó sentenciado en una mañana para olvidar en Carballo.