La iglesia Santa María de Noicela, en el municipio de Carballo, continúa con la recuperación de una tradición ancestral de bendición de animales. Este viernes, día de San Antón Abade, patrono de los animales domésticos, en la misa solemne se llevó a cabo este ritual y el párroco pudo bendecir a todos los animales presentes, tanto dentro como fuera de la iglesia.
A pesar de que la mayoría eran perros, que venían con sus dueños y padres adoptivos desde diferentes lugares de la zona, también se pudo ver otros menos habituales como dos burras, que esperaban tranquilamente con su dueña a las puertas del templo. El Concello de Carballo también colaboró regalando un dispensador de bolsas en forma de hueso, que fue repartido en los oficios. Como muestra de solidaridad con los animales, tampoco hubo bombas durante la celebración, que fue muy concurrida en esta jornada soleada del 17 de enero.