La Xunta de Galicia ha comunicado, a través de su delegado Gonzalo Trenor, a la factoría de Stolt Sea Farm en Camariñas la aprobación y renovación de su concesión hasta el dieciocho de febrero de 2031. El acuerdo incluye la posibilidad de prorrogar dicha concesión con plazos de igual o inferior duración con una fecha límite, fijada en el dieciocho de febrero del año 2071.
Se trata de una empresa líder a nivel mundial en la acuicultura de peces planos. La granja, situada en Camariñas, ocupa una superficie por encima de los setecientos metros cuadrados en dominio público y alrededor de ochenta y siete mil de dominio privado. Su producción media oscila en torno a las mil doscientas toneladas anuales de rodaballo, lenguado y lenguado con pintas.
Se trata de una de las granjas con mayor producción del grupo debido a su captación de agua, la cual obtienen en mar abierto y en profundidad. Esto provoca que las temperaturas del agua sean más soportables para los peces en verano (momento de madurez sexual) y hace que la granja sea más adecuada para cultivar un rodaballo con un tamaño y peso superiores.
En Cabo Vilán, da empleo a una media de 32 trabajadores, todos ellos naturales y residentes en Carnota y Camariñas, con un ratio de contratos indefinidos por encima del noventa por ciento.
El sector de la acuicultura en la comunidad gallega facturó durante el pasado año hasta 256 millones de euros, un diez por ciento más que en 2021. Los peces de cultivo representaron más del 35% del valor total, a pesar de representar menos de un cinco por ciento de la producción. Las especies criadas en Camariñas están incluidas dentro de esas cifras, como el lenguado o el rodaballo, pescado del cual el 100% de la producción española es gallega.
El delegado de la Xunta de Galicia quiso garantizar el apoyo del gobierno regional al sector de la acuicultura a través de proyectos que confíen en la comunidad autónoma y en su potencial porque “iso supón máis economía, máis competitividade e máis emprego”. En concreto, Stolt Sea Farm lleva recibiendo ayudas y apoyos de la Xunta desde el año 2017 por valor de 380.000 euros para mejorar el equipamiento, así como incrementar la competitividad de la instalación afincada en la localidad de Camariñas.
Gonzalo Trenor también hizo referencia a la incertidumbre que se ha creado por parte del gobierno central con respecto a la Ley del Litoral. Una norma que, dice la Xunta, tiene por objetivo defender la actividad social y económica de la costa respetando la legalidad y el cuidado del medio ambiente.
“Son empresas que agora non sabe como afrontar o seu futuro,” afirmaba el delegado, haciendo referencia a la inseguridad jurídica que, dice, supone el recurso ante el Tribunal Supremo para las empresas que quieren apostar por la comunidad autónoma gallega.