Senda Nova despedía el pasado domingo su edición número 12 del Outono en Marcha con una nueva subida al Monte Neme. A pesar de la niebla y del orballo de la jornada, más de medio centenar de participantes pudieron disfrutar de la magia, la leyenda, el respeto y, sobre todo, el miedo a la destrucción de este emblemático lugar, que, según la entidad naturallista se ve amenazado por los eólicos, entre otras cosas.
La escuela de participación ciudadana de Narón se sumó a la última ruta del domingo. Senda Nova ya prepara sus nuevas actividades para las próximas semanas.