En Oleiros se dedican a ‘cazar moscas a cañonazos’ en el buen sentido. Que es, básicamente, armarse con escopetas y disparar veneno a los nidos de velutinas. En la guerra contra las avispas asiáticas todo vale. Especialmente, siendo el municipio de la provincia más afectado por la presencia de estos insectos. “Oleiros está de moda”, dice el alcalde. Pero seguro que piensa en otro tipo de visitantes.