Los dos hermanos de 13 y 16 años detenidos por su presunta implicación en la muerte de su madre, cuyo cadáver apareció en la noche del miércoles en el interior de un coche en Castro Urdiales (Cantabria), llamaron por teléfono a su abuela tras el suceso.
Así lo han indicado a EFE fuentes próximas a la investigación, que no han podido precisar si en esa llamada confesaron a su abuela el crimen.
Las mismas fuentes han añadido que el cadáver de la mujer, con signos de violencia, apareció maniatado en los asientos traseros del coche donde fue hallado su cuerpo.
El cuerpo sin vida fue encontrado anoche, cerca de las 21:00 horas.
Los hermanos estaban desaparecidos desde el hallazgo del cadáver y la Guardia Civil montó un dispositivo para encontrarlos; fueron detenidos en torno a las 2:15 horas de este jueves en el parque Cotolino de la misma localidad cántabra.
De los dos menores, el de 13 años es inimputable y ambos han pasado a disposición de la Fiscalía de Menores.