La Policía Nacional ha detenido a 14 personas en Salt y Banyoles (Girona) acusadas de estafar a varias víctimas con el método de escribirles un mensaje haciéndose pasar por su hijo, que se encontraba en apuros y pedirles una transferencia urgente de 3.000 o 4.000 euros.
Según ha informado la policía en una nota de prensa, los 14 detenidos formaban una organización criminal que se dedicaba principalmente a perpetrar esta estafa.
El modus operandi de la organización consistía en realizar un envío masivo de mensajes a teléfonos móviles al azar en los que el estafador escribía una frase del tipo: "Hola papá, soy yo, te escribo desde otro número porque he perdido el móvil".
Algunos receptores del mensaje, creyendo que se trataba realmente de sus hijos, entablaban conversación con los estafadores.
En ese momento, el presunto hijo les decía que estaba en apuros, que debía saldar una deuda urgente y pedía a "sus padres" una transferencia de 3.000 o 4.000 euros, que varias víctimas llegaron a realizar.
Además, el estafador ponía siempre excusas para no poder hablar por teléfono.
La investigación policial contra esta banda se llevó a cabo con la colaboración del grupo antifraude de una importante entidad bancaria, y comenzó tras la recepción de numerosas denuncias de víctimas distribuidas por todo el territorio nacional, quienes manifestaban que habían sufrido la estafa descrita.
Tras varias gestiones policiales, los agentes lograron seguir el rastro del dinero enviado por las víctimas, dando con los estafadores.
Los investigadores detectaron que una vez la víctima enviaba el dinero a una cuenta bancaria, el dinero se distribuía a otras cuentas para intentar borrar su rastro.
Una vez localizados a los autores, en las localidades de Banyoles y Salt, se procedió a la detención de catorce integrantes de la organización criminal con la colaboración de los Mossos d’Esquadra.
Entre los detenidos se encuentra el cabecilla de la organización en Banyoles, que era el encargado en esa localidad de la captación de jóvenes de entre 20 y 30 años para llevar a cabo estas estafas o también para hacer de “mulas”, es decir, recibir el dinero estafado de la víctima a cambio de una compensación económica por parte de la organización.
De este modo, haciendo que la cuenta de recepción del dinero no fuera solo una sino el conjunto de las cuentas de las "mulas", la organización creía estar dificultando el seguimiento del rastro del dinero y la identidad de los estafadores.
La Policía Nacional ha hecho hoy hincapié en que la principal lucha contra este tipo de delitos empieza con la prevención por parte del ciudadano y recomienda, en caso de recibir un mensaje de un supuesto hijo desde otro teléfono que no es el suyo, intentar contactar con él por otra vía que no sea la red Whatsapp.
También aconseja sospechar del lenguaje o expresiones de la persona que nos escribe, cerciorarse de quién es el titular de ese número de teléfono si se va a hacer una transferencia o Bizum y, en el caso de haber sido víctima de la estafa, acudir a las dependenciasde la Policía Nacional para poner una denuncia.