Las pruebas de ADN practicadas a los restos óseos, junto a prendas de ropa, hallados en Mazaricos (A Coruña) son de dos personas desaparecidas, cuya muerte se vincula con un delincuente.
Así lo han confirmado fuentes próximas al caso consultadas por Europa Press que han precisado que en el caso de uno de los desaparecidos, Javier Iglesias, un hombre de 50 años que residía en Culleredo, está confirmada la autoría en su muerte de un vecino de Mazaricos, José Manuel Martínez, más conocido como ‘Pandolo’, y con numerosos antecedentes.
En diciembre, aparecieron en este municipio coruñés nuevos restos humanos, tras un primer hallazgo, y como resultado del inicio de una búsqueda por un vecino desaparecido en diciembre de 2022.
Entonces, se amplió el dispositivo que se llevó a cabo por parte de distintos efectivos después de que apareciese, inicialmente, un cráneo y después más restos óseos y prendas de ropa distribuidos en cinco bolsas que no pertenecerían a esta misma persona.
La búsqueda comenzó tras la desaparición de Antonio Tuñas, vecino de Mazaricos, de 72 años, cuyo cráneo apareció en un terreno de Gosolfre, en Chacín, Mazaricos.