Las autoridades ucranianas han detenido a tres integrantes de una célula de agentes del servicio secreto ruso que preparaban ataques con drones contra objetivos militares ucranianos en la ciudad y la región de Kiev, según anunciaron hoy la Fiscalía y el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU).
Los tres detenidos habían adquirido material para fabricar explosivos caseros que planeaban lanzar con una decena de drones contra instalaciones del Estado Mayor ucraniano, del Ministerio de Defensa y de otros puestos de mando militares ucranianos, según la investigación.
El grupo fue establecido por el Servicio Federal de Seguridad ruso (FSB) en 2018 y fue activado tras el comienzo de la invasión militar a gran escala rusa de Ucrania, según el SBU ucraniano.
Entre los detenidos hay una mujer que hizo este mes de marzo un curso para operadores de drones, muy populares en Ucrania en el actual contexto de guerra entre quienes quieren contribuir como voluntarios al esfuerzo bélico.
Los tres sospechosos modificaban drones civiles para convertirlos en aparatos de uso militar a los que poder incorporar los explosivos que ellos mismos fabricaban. El grupo llegó a probar sus drones en un espacio abierto, según el SBU.
Durante las redadas en sus residencias se encontraron explosivos con detonadores, armas de fuego y munición.