El ministro español de Exteriores en funciones, José Manuel Albares, dijo este lunes que el primer contingente de hispano-palestinos que está siendo evacuado hoy de Gaza ya se encuentra en el punto de control egipcio del paso de Rafah, tras haber superado el control del lado palestino.
"Los primeros hispano-palestinos han cruzado el punto de control palestino. Hay un doble punto de control (en el paso de Rafah). Uno palestino y después uno egipcio. Están ya en el punto de control egipcio para ya entrar definitivamente a Egipto", declaró el ministro en Bruselas sobre la situación de 41 palestinos con pasaporte español y sus familiares.
Tras semanas intentando salir del enclave palestino -donde han muerto más de 11.000 personas por los bombardeos israelíes-, los españoles irán saliendo en tandas de entre 30 y 40 personas al día, según el coordinador de la comunidad española en el enclave, Salah Awad El Sousi, también incluido en la lista de salidas de hoy.
Al llegar al Consejo de Exteriores, que se celebra hoy en Bruselas, Albares aseguró que tenía "buenas noticias", ya que "por fin han comenzado a pasar los primeros ciudadanos hispano-palestinos".
"Les puedo confirmar que los primeros hispano-palestinos han cruzado ya el primer punto de control palestino y están haciendo los trámites para cruzar el punto de control egipcio", recalcó.
Precisó que lleva "bastante tiempo" atravesar cada uno de los dos controles del paso de Rafah.
Añadió que ayer "a lo largo del día" las autoridades israelíes confirmaron a España la autorización para la salida y recordó que es necesario una doble autorización, tanto de Israel como de Egipto.
También señaló Albares que ha estado "en contacto" con sus homólogos de Israel y Egipto "a lo largo de estas semanas para que esta salida" de españoles "pudiera producirse".
"La operación para la salida del primer contingente de hispano-palestinos está ya en marcha y por el momento todo va bien y esperemos que termine igualmente bien", comentó, pero pidió ser "cauto hasta el último momento".
Resaltó que hoy se ha abierto el paso de Rafah y que la embajada española en El Cairo está "completamente movilizada".
"Ya hemos hablado con el Ministerio de Defensa para que sus aviones vengan en el momento oportuno para trasladar a estos hispano-palestinos a España", dijo el ministro de Exteriores español en funciones.
También apuntó que los ciudadanos españoles que trabajaban en organismos internacionales, "y quisieron hacerlo ya hace bastantes días, pudieron abandonar Gaza".
En total, la comunidad con pasaporte español de Gaza es de unas 180 personas, y ahora se estima que podrán salir 200 personas, incluyendo cónyuges y familiares, que tras llegar a Egipto serán evacuados a España.
El plan de evacuación contempla trasladarlos a El Cairo, desde donde un avión del Ejército del Aire español los llevará a España.
En los últimos días, extranjeros y palestinos con doble nacionalidad -entre ellos con pasaporte de EEUU, Canadá, Alemania, Holanda, Francia, Polonia, India, Filipinas, Rusia o Brasil- han logrado salir del enclave, en base a las listas que la Autoridad de Cruces y Fronteras de Gaza publica cada día.
Aunque la autoridad está controlada por Hamás -que gobierna de facto la Franja desde 2007-, las listas se publican una vez tienen el visto bueno tanto de Egipto como de Israel.
En las últimas 24 horas continuaron los bombardeos y enfrentamientos armados en los alrededores del hospital de Al Shifa, principal de Gaza, donde murieron tres enfermeras, indicó Naciones Unidas, que anteriormente había denunciado la muerte de dos bebés prematuros y otros diez pacientes en la instalación.
Según el informe diario de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU, los últimos ataques provocaron daños en la zona de atención a enfermedades cardiovasculares y en la maternidad, entre otras instalaciones del hospital en Ciudad de Gaza, la capital de la franja.
"Algunos desplazados internos, personal y pacientes han conseguido huir, pero otros siguen atrapados dentro", subraya el documento, recordando que está en riesgo la vida de 36 bebés en incubadoras y pacientes con problemas renales en diálisis.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que ha perdido el contacto con Al Shifa, mientras que otro hospital de la capital gazatí, el Al Quds, ya no está operativo por la falta de combustible, según advirtió por su parte la Media Luna Roja Palestina.
Naciones Unidas señala además que el sábado un ataque aéreo destruyó la Clínica Sueca en el oeste de Ciudad de Gaza, donde se refugiaban medio millar de desplazados internos, y en la noche del sábado al domingo otro ataque mató a dos médicos y causó heridas a otros en el hospital Al Mahdi, también en la capital de la franja.
El ejército israelí alega que grupos armados operan en Al Shifa y en túneles subterráneos bajo las instalaciones, algo que niega el Ministerio de Salud de Gaza, que demanda una investigación independiente de este tipo de ataques a zonas sanitarias.
El informe de la ONU recuerda que hospitales y personal médico están específicamente protegidos por la ley humanitaria internacional, por lo que no pueden ser objetivos de ataques militares, y operaciones en ellos o sus alrededores deben tener especial cuidado en proteger a pacientes, sanitarios y otros civiles.
Según el documento diario, el Ejército israelí ha abierto un corredor para que pacientes y personal abandonen el hospital de Al Shifa, pero que según informes de la OMS algunos de los que huían fueron alcanzados por disparos.
También ha habido intentos de las fuerzas israelíes de entregar combustible al hospital para alimentar servicios de urgencia, que al parecer han rechazado los responsables de la instalación, sosteniendo que sólo aceptarán donaciones de este tipo a través del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
Naciones Unidas recuerda asimismo en el informe que en el fin de semana se produjeron ataques contra el edificio del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Gaza y contra una escuela de la Agencia de la ONU para los Refugiados (UNRWA), causando un número de víctimas aún no confirmado.
Debido a la pérdida de contacto con muchos hospitales en el norte de la franja, el Ministerio de Sanidad de Gaza no ha actualizado este fin de semana sus cifras de víctimas desde el inicio del conflicto el 7 de octubre, por lo que éstas se mantienen en 11.078 muertos (4.506 de ellos niños y 3.027 mujeres).
Entre esas víctimas hay al menos 101 trabajadores de la UNRWA, lo que supone la mayor cifra de víctimas que las Naciones Unidas ha tenido en un conflicto desde su creación a finales de la Segunda Guerra Mundial.
El informe también cita dos bombardeos en el campo de refugiados de Jabalia el domingo, que causaron la muerte de 18 palestinos, y otro en un edificio residencial de Jan Yunis, en el sur de Gaza, con al menos 13 muertos y 20 heridos.
Tras más de un mes de asedio, sin electricidad y escasez de alimentos, agua y combustible, el informe recuerda la situación límite de los gazatíes y subraya por ejemplo que algunos están consumiendo agua de mar, lo que puede causar problemas de salud por los altos índices de contaminación de ésta.
El alto representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Josep Borrell, instó este lunes a los Veintisiete a empezar a debatir una “solución definitiva” al conflicto israelí-palestino cuando concluya la guerra que libran Israel y el movimiento islamista Hamás en la Franja de Gaza.
“Hoy no solo vamos a hablar de la nefasta situación en Gaza. Deberíamos empezar a pensar en la solución para la posguerra”, indicó Borrell a la prensa a su llegada a un Consejo de ministros de Exteriores de la Unión.
El jefe de la diplomacia comunitaria dejó claro que no solo se debe hablar de la “reconstrucción" de Gaza sino también de “ofrecer una solución integral a la cuestión palestina”.
“Es el verdadero problema que tenemos que afrontar, que es la solución definitiva al conflicto entre Israel y Palestina”, aseveró.
Borrell dijo que hay que “buscar la paz entre ellos” y consideró que la solución para Gaza no puede ser una solución aislada”.
Los Veintisiete emitieron el domingo una nueva posición común sobre la situación en Gaza en la que hicieron hincapié en la necesidad de pausas “inmediatas” y pasillos para que llegue la ayuda humanitaria a la población y condenaron el uso de hospitales por Hamás como escudos humanos.
Además, instaron a Israel a mostrar “máxima moderación” en su campaña sobre Gaza.
Borrell reconoció lo “difícil” que ha sido llegar a esa posición común de la UE después de que en la última resolución de Naciones Unidas sobre el conflicto los Estados miembros votaran de diferente manera.
Por su parte, el comisario europeo de Gestión de Crisis, Janez Lenarcic, aseguró a su llegada a la reunión que la situación humanitaria en Gaza es “catastrófica” y pidió pausas humanitarias “significativas” para que entre la asistencia.
“En primer lugar, tienen que ser anunciadas con tiempo para que las organizaciones humanitarias se puedan preparar para explotarlas”, aseveró.
En segundo lugar, solicitó que estén “claramente definidas” y que cuenten con “tiempo suficiente” y no se vean interrumpidas por bombardeos u hostilidades para que los trabajadores humanitarios puedan llevar a cabo su labor.
Lenarcic afirmó que tienen que entrar “muchos más camiones” en la Franja y subrayó que la ayuda tiene que poder ser distribuida en todo el territorio de Gaza.
Recalcó en especial la necesidad de que entre combustible para que puedan funcionar los hospitales gazatíes, ya que “más de la mitad” de ellos han tenido que detener su actividad por esa razón.
Preguntado por la posibilidad abrir un pasillo humanitario por vía marítima como ha propuesto Chipre, Lenarcic admitió que, aunque están dispuestos a apoyar todas las posibilidades para que llegue la ayuda, ésta es una opción limitada porque, por el momento, no hay infraestructura logística en la costa de Gaza para gestionarla.
El ministro de Exteriores de Chipre, Constantinos Kombos, aseguró que su iniciativa tiene como puntos fuertes la cercanía de la isla a la zona en conflicto, la infraestructura con la que cuenta el país y sus “relaciones estratégicas” con actores “clave” en la región.