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martes | 5 noviembre | 2024
Un conductor muerto, cuatro heridos, 1.315 desplazados, 1,2 millones de hogares sin electricidad y perturbaciones en el transporte constituyen el impacto hasta ahora del paso de la borrasca Ciarán por la fachada atlántica francesa.
El ministro de Transportes de Francia, Clément Beaune, indicó en declaraciones a la emisora France Info que el fallecimiento de este chófer en el departamento del Aisne se produjo por la caída de un árbol sobre un camión.
Beaune confirmó la prohibición de circular decretada por la Prefectura (delegación del Gobierno) del departamento bretón de Finistère, e insistió en que también hay que renunciar a utilizar los vehículos en los dos departamentos que están en alerta roja por viento, Côtes d'Armor en la costa de Bretaña y la Manche en la de Normandía.
Otros 24, todos en la fachada atlántica, se encuentran en alerta naranja por Ciarán.
Además, "1.315 personas tuvieron que ser desplazadas, especialmente de cámpings y de áreas de acogida", así como de varias viviendas de la ciudad de Brest (Bretaña, noroeste) debido a la caída de una grúa, anunció el ministro del Interior, Gérald Darmanin.
Los bomberos han tenido que realizar cerca de 1.900 intervenciones en todo el país. Tres de los cuatro heridos son bomberos, añadió Darmanin, que pidió a la población seguir "extremadamente vigilante".
Los camiones tienen prohibida la circulación en toda la región de Bretaña y cinco regiones del noroeste de Francia han anulado durante la jornada del jueves todos sus trenes regionales (Bretaña, Normandía, Altos de Francia, Centro-Valle del Loira y País del Loira).
También se han suprimido el 10 % de los trenes de alta velocidad (TGV) en Francia, con la suspensión del tráfico en ejes como París-Le Mans y París-Nantes. En el servicio de cercanías de París, buena parte de la línea A (una de las de más tráfico) está parada, y eso mismo ocurre con algunas más.
Dos aeropuertos en Bretaña, el de Brest y el de Quimper, están cerrados desde ayer y en otros del noroeste de Francia se han tenido que desviar aviones a algunos más alejados.
En los aeropuertos de París, esta mañana había algunos retrasos por el temporal, reconoció el ministro.
Enedis, filial de EDF responsable de líneas eléctricas, indicó que esta mañana había 1,2 millones de hogares sin suministro de corriente. La empresa tenía movilizados a 3.000 de sus trabajadores para hacer frente las averías previsibles.
La pasada noche, en las costas de Bretaña, se registraron ráfagas de hasta 207 kilómetros por hora en la punta de Raz, en el departamento de Finisterre, o de 156 km/h en Brest, la principal ciudad de la región.
En la vecina Normandía, se midieron vientos de entre 150 y 170 kilómetros por hora.
En la costa, Météo France ha alertado sobre el riesgo de fuerte oleaje, de entre seis y ocho metros en la mayor parte de la costa atlántica, y de entre ocho y diez metros en la de Bretaña.
La borrasca Ciarán, con vientos de unos 160 kilómetros por hora, ha provocado la suspensión de servicios ferroviarios y el corte del suministro eléctrico en miles de hogares en el sur de Inglaterra, según las autoridades británicas.
En el condado de Cornualles, en el suroeste de Inglaterra, unas 7.000 propiedades están sin electricidad debido a las lluvias torrenciales y los fuertes vientos, que afectan también al sureste inglés, de acuerdo con los ayuntamientos locales.
Las autoridades han pedido a la población que eviten conducir en las áreas costeras del sur inglés y que traten de no desplazarse y trabajen desde casa.
Cientos de escuelas han cerrado en la localidad de Southampton, en la isla de Wight, en el condado de Devon, así como en los de East Sussex y Dorset, todos en el sur de Inglaterra.
También hay alertas de riesgo de vida en Escocia, hacia donde se espera que los vientos lleguen este viernes.
La llegada a Centroeuropa de la tormenta Ciarán, que traerá vientos de hasta 150 kilómetros por hora, ha llevado a las autoridades de Bélgica y Países Bajos a activar la alerta naranja en las zonas costeras, mientras que el aeropuerto Schiphol de Ámsterdam ha cancelado cientos de vuelos previstos para esta tarde.
En Países Bajos, la alerta naranja se aplica a la provincia occidental de Zelanda, fronteriza con Bélgica, a partir de la 11.00 hora local (10.00 GMT), y durante el resto de la tarde aplicará el mismo código en Holanda del Sur, Holanda del Norte y la zona del Mar de Frisia, más hacia el norte de Países Bajos. En el centro del país, el instituto meteorológico (KNMI) aplica un código amarillo.
El aeropuerto Schiphol de Ámsterdam ha cancelado "cientos de vuelos" previstos para hoy como resultado de la llegada de Ciarán, y la aerolínea neerlandesa KLM también cancelará vuelos desde comienzos de la tarde hasta que pase la borrasca, lo que podría ascender a aproximadamente 380 vuelos en la capital neerlandesa, según un portavoz de la compañía.
El aeropuerto de Róterdam también ha cancelado algunos vuelos, seis de ellos fletados por la aerolínea Transavia.
Además, la compañía ferroviaria NS ha adaptado los horarios en la zona donde aplica el código naranja, y las compañías navieras locales también han cancelado algunos viajes.
Las autoridades neerlandesas ya recomendaron ayer trabajar este jueves desde casa debido a la tormenta que también azotará Bélgica, donde el Instituto Real de Meteorología (IRM) ha advertido que se esperan vientos de entre 70 y 150 kms/h.
En Bélgica se ha decretado la alerta naranja en la costa y las provincias de Flandes Occidental, Flandes Oriental y Hainaut, y la alerta amarilla en el resto del país, donde los bomberos han tenido que intervenir unas sesenta ocasiones por problemas como tejados levantados por el viento.
La compañía nacional de trenes SNCB ha anunciado que este jueves no circularán trenes hacia la costa mientras que en el resto de la red la velocidad se limitará a 80 kms/h.
Se espera que la tormenta alcance su pico de intensidad entre las 10.00 y las 15.00 hora local, con vientos en Bruselas que llegarán hasta los 110 kilómetros por hora.
