La Asociación Oleira de Buño ultima los preparativos para la próxima edición de la Mostra, que comenzará el jueves 1 de agosto. Este lunes empezaron a montar las casetas en el parque Luciano García Alén, donde se instalarán los ocho puestos de alfarería entre el 1 y el 4 de agosto. En otra de las casetas se ubicará el bar del que se encargará la asociación O Quinteiro, y en la carpa se expondrán las piezas de olería, como ocurría habitualmente. 

El presidente de los oleiros, Antonio Pereira, O Rulo, destacaba ayer la gran colaboración de todos los miembros de la asociación, mientras todos ellos arrimaban el hombro para montar las casetas. Hasta ahora era el Concello el que se encargaba de estas tareas, pero al organizar la entidad en solitario el evento deben ocuparse ellos mismos. 

Antonio Pereira no quiere entrar en estas polémicas y prefiere centrarse únicamente en el evento que preparan todos los alfareros para exhibir su trabajo, ya que esta es su forma de ganarse la vida. “Nós queremos centrarnos nesta Mostra, ensinar o que facemos e o que queremos facer con barro actual, novas tendencias... porque os tempos cambian e nós non facemos o mesmo que hai dez anos por exemplo”, indica Antonio Pereira. 

La entidad es conscientes de sus limitaciones al no disponer de la ayuda de 80.000 euros que concedía la Diputación para el evento, aunque están pendientes  de una pequeña cuantía de este organismo, de ahí que todos los artesanos deban colaborar para un certamen más discreto, “sin luxos” ni grandes actuaciones. La esencia de la Mostra de Olería es el barro y así lo demostrarán los próximos días, donde la exhibición de torno es uno de los grandes protagonistas. 

Fran Gorín, O Rulo y Pablo Rodríguez, de Risco Estudio, un joven oleiro que participa por primera en el evento, harán las demostraciones de torno el viernes, sábado y domingo. También habrá obradoiros de barro, actuaciones de música tradicional y actividades para niños, entre otras cosas. 
En el acto de apertura el jueves -no habrá acto inaugural- participará un oleiro que en enero cumplirá 100 años, Jesús Mourón, además de vecinos y alfareros.