Como cada martes de Pascua, la parroquia larachesa de Montemaior celebró la fiesta en honor a Nosa Señora do Socorro, que se remonta a muchos años de historia. El párroco Isolino Esmorís celebró el culto a las 13.00 horas ante 31 feligreses, incluido el cura, la sacristana y el campanero, que también hizo las veces de “fogueteiro”. Al final la lluvia impidió la salida de la procesión.