Unas doscientas personas se han concentrado este sábado en A Coruña, agrupadas en la coordinadora "Eólica, así non", para exigir al Gobierno la retirada del plan de ordenación de eólica marina (POEM), que prevé que más de la mitad del espacio reservado para esta energía se sitúe en la costa gallega.
Con pancartas con mensajes como "En defensa de la pesca artesanal", "Respeto a la gente del mar", "Con la pesca no se juega" o "En Madrid también hay viento", entidades sociales se han manifestado frente a la sede de la Delegación del Gobierno en contra de los planes del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico.
A pesar de que los POEM reservan un espacio limitado para la eólica marina, con 19 polígonos en una superficie que representa el 0,46 % del espacio marítimo, en la zona noratlántica se prevé la instalación de ocho parques.
En la concentración ha participado la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, que ha apoyado las reivindicaciones del sector pesquero y ha recriminado que "casi la mitad de la energía eólica marina" del conjunto del Estado español se instale en las costas gallegas.
"Va a suponer un golpe mortal para la pesca", ha declarado la nacionalista, que además ha destacado al sector pesquero como "una de las columnas vertebrales" de la economía en Galicia, que no puede ponerse "en riesgo" únicamente por los "intereses del lobby eléctrico".
Según los datos de un estudio realizado por la Universidad de Santiago, la pesca representa el 2 % del PIB de Galicia y conlleva más de 31.000 puestos de trabajo. Además, teniendo en cuenta el conjunto del sector mar-industria, alcanza el 5 % del PIB, más de 12.000 millones de euros facturación y unos 64.000 empleos directos.
Pontón ha declarado que el Gobierno central quiere "convertir a Galicia en una colonia energética de Madrid" y ante esto ha defendido que la costa gallega "no está en venta" y que no es el lugar para que las eléctricas "sigan haciendo caja".
"Desde el BNG lo que reclamamos, igual que reclama el sector pesquero y los grupos medioambientales, es que se retire el POEM y esa intención que tiene el Gobierno central, con la complicidad de la Xunta de Galicia -PSOE y PP-, de seguir beneficiando a las eléctricas sin importarles que esto suponga un golpe mortal al sector de la pesca", ha expresado la portavoz.
Por último, ha advertido que la plataforma continental gallega "es muy pequeña", lo que no permite "la coexistencia entre la pesca y el sector eólico marino".
En ese mismo sentido ha hablado por ejemplo Javier Costas, patrón mayor de la Cofradía de Cangas do Morrazo (Pontevedra). Según ha expresado, a diferencia de otros países como Escocia o Irlanda, la plataforma gallega es "muy pequeña" y la instalación de los eólicos va a suponer "grandes destrozos" para el sector de la pesca tradicional.
"De nada nos vale que nos vendan que esto va a regenerar muchos puestos de trabajo cuando nos vamos a cargar muchísimos más, relacionados con la pesca litoral", ha señalado Costas.
A su vez, Ricardo Villar, patrón mayor de Cedeira (A Coruña), ha criticado que los parques eólicos que se prevén instalar se sitúen en "caladeros históricos" de la mayoría de la flota gallega. Todo ello "sin preguntar, sin estudios y sin saber cómo va a afectar a la pesca".
"La única información que tenemos es de otros parques que se instalaron en Portugal y por lo que nos dicen los compañeros pescadores de allí, alrededor de los eólicos no hay vida, no hay pesca", ha advertido.
Basilio Otero, patrón mayor de Burela (Lugo) y presidente de la Plataforma en Defensa de la Pesca y los Ecosistemas Marinos, ha señalado que la pesca "fija población" y además aporta "alimentos saludables", por lo que ha pedido la retirada del POEM y la dimisión de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera.
"Pedimos diálogo, porque tenemos los puentes rotos con este Ministerio. No nos ven ni nos escuchan", ha señalado.
Durante la concentración, representantes de las plataformas han metido por debajo de la puerta de la Delegación del Gobierno un escrito en contra del POEM, en el que demandan su retirada y que se respete tanto la actividad pesquera como los ecosistemas marinos.