Un equipo especializado de la Guardia Civil desactivó en la tarde de ayer, sobre las 17 horas, un artefacto explosivo en una playa de la parroquia de Noalla, en Sanxenxo. En concreto, se trataba de una antigua granada localizada por una persona particular que alertó al 112 de Galicia de su hallazgo. En el transcurso de la conversación, explicó que observaba lo que pensaba que era un artefacto explosivo oxidado, que evidenciaba el paso del tiempo. 

Desde el servicio de coordinación de emergencias se solicitó la colaboración de los gentes de la Guardia Civil y de la Policía Local de Sanxenxo, así como fue informada la Unidad de Policía Adscrita de Galicia (UPA). Al tratarse de una zona de difícil acceso, el equipo especializado que se encargó de las tareas de retirada del explosivo señaló que tendrían que acceder por mar hasta el lugar donde este se encontraba, y donde fue finalmente desactivado.