Fisterra despidió los actos litúrgicos de la Semana Santa con un concurrido domingo de Resurrección, que pudo llevarse a cabo después de que la lluvia impidiese disfrutar de uno de los momentos más esperados, la procesión del Santo Enterro de Viernes Santo. Ha sido una Semana Santa pasada por agua que ha frustrado varias procesiones en la Costa da Morte, que este domingo ponía su foco de atención en la vívida representación de la Resurrección de Cristo en Fisterra.
A quince minutos para el inicio de la celebración la lluvia hizo acto de presencia, pero aguantó y el evento pudo llevarse a cabo. Como comentan los vecinos, nunca llueve a la hora de la Resurrección, por lo que el milagro es doble. A mediodía, vecinos de todas las edades dieron vida a la ancestral representación, narrando en verso la llegada desconsolada de un grupo de mujeres al Santo Sepulcro, donde un ángel les anuncia la Resurrección de Cristo. Las mujeres corren raudas a comunicar la buena nueva a los discípulos, que guiados por Simón Pedro, acuden al sepulcro y comprueban que está vacío. Repique de campanas, la suelta de palomas de la paz y el izado de banderas celebran la Resurrección de Cristo, en una cita que es Fiesta de Interés Turístico Nacional. El evento concluyó en el atrio de la iglesia de Santa María das Areas con la tradicional Danza dos Paus –cuyo origen data del siglo XIII- ante las imágenes de Cristo Resucitado y la Virgen de la Resurrección.
Aunque los actos religiosos tocan a su fin, en Fisterra siguen las fiestas del Santo Cristo. Así, este lunes habrá alborada y pasacalles y a las 12.00 horas tendrá lugar la misa solemne por los devotos del Santo Cristo, cantada por el coro Nosa Señora das Areas. La sesión vermú correrá a cargo del grupo Mar D’Arousa, que repetirá en la verbena. Además, a partir de las 16.30 horas habrá un festival infantil. Fisterra pondrá así el cierre a tres días de festejos.