El pleno del Senado debatió este miércoles la reprobación de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y la mayoría absoluta del PP provocó que la vicepresidenta pase a ser el quinto miembro del Gobierno en ser rechazado en esa sede parlamentaria. Los ministros Bolaños, Marlaska, Puente y Albares, además del fiscal general de Estado, ya han sido reprobados por el Senado.
“Montero debería dimitir o ser cesada, pero como no lo hacen, la reprobamos para frenar el bochorno de padecer a la peor ministra de Hacienda de la Democracia Española”, señaló en defensa de la moción la senadora popular Alicia García, al tiempo que acusó a Pedro Sánchez y a la vicepresidenta Montero de “estar en rebeldía constitucional”, al señalar que es el primer Gobierno en la democracia que “lleva dos años en el poder con unos presupuestos generales del Estado de otra legislatura, con otro gobierno y otro Parlamento”.
“Esa es razón sobrada para que sea reprobada”, añadió, antes de sumar razones como las subidas de impuestos; las cesiones al chantaje independentista con la quita de la deuda autonómica o la no negociación del nuevo sistema de financiación autonómica; y el hecho de que hace simultáneo su cargo con el de candidata en Andalucía.
Finalmente, la senadora se hizo eco de las críticas que la ministra hizo a la absolución del futbolista Dani Alves, y las puso como ejemplo de falta de respeto a la separación de poderes y a la presunción de inocencia por parte de Montero.
El senador socialista Juan Espadas hizo, por su parte, una firme defensa de Montero. En esa defensa, o al menos al reproche al PP por las reiteradas reprobaciones a ministros de Pedro Sánchez, también acudieron senadores como el valenciano Enric Morera, de Compromìs, o el canario Fabián Chinea (Agrupación Socialista de La Gomera), además de Dolores Etxano (PNV).
Espadas, desplazado como candidato socialista a la Junta de Andalucía por la propia Montero, espetó al PP que “son ustedes los reprobables. Van ustedes camino de que tengamos de poner un punto del día fijo dedicado a sus reprobaciones. Ya van seis”.
“Me parece dantesco el espectáculo de las sesiones de control al Gobierno, la crítica política debería ser compatible con el respeto”, continuó Espadas.
“Se les está acabando el juguete. Ustedes, que califican de vergüenza la actuación del presidente del Tribunal Constitucional, me quieren dar lecciones de separación de poderes. Y después de votar en contra, lamentan que no haya traído los objetivos de déficit o los presupuestos, que se prorrogan y dan oportunidad al Gobierno para afrontar la Dana o los aranceles”, añadió.
“La ministra pidió disculpas por sus comentarios ante la sentencia pero ustedes no la piden jamás, tampoco por pactar recortes en derechos e igualdad, como han hecho con la ultraderecha en Valencia”, concluyó. l