O Mar de preciosa es un refugio ubicado en A Costa da Morte, concretamente en Camariñas. El hotel fusiona la arquitectura con la belleza de la naturaleza, proporcionando así un entorno que transmite paz y tranquilidad. La vivienda era una antigua casa de pescadores que ha sido restaurada para rendir homenaje a la pesca artesanal y a la vida cercana en un pueblo marinero.
Detrás del proyecto se encuentran Lorena Leis y Carlos Santos: “O mar de Preciosa realmente es un proyecto familiar. Yo llegué al mundo del turismo de casualidad. Arranqué el proyecto junto a Carlos Santes, un primo de mi marido. La casa era de los abuelos de Carlos y en el momento en el que fallecieron, se puso a la venta. Decidimos invertir y abrir lo que a día de hoy es O Mar de Preciosa”, afirma la propietaria.
El hotel cuenta con seis habitaciones -dos de ellas suites- inspiradas y orientadas hacia el mar, aprovechando las privilegiadas vistas que se pueden percibir a través de los amplios ventanales. La decoración de todas ellas es minimalista, buscando la belleza en la propia luz. “Cuando empezamos este proyecto yo tenía muy claro que quería que transmitiese paz y calma. A O mar de preciosa lo hace especial el entorno y además la decoración es diferente a lo que estamos acostumbrados. Las vistas son de A Costa da Morte y del Océano Atlántico y creo que eso lo hace todavía más especial. Contamos con una habitación que es un poquito más familiar, pero al resto de las habitaciones suelen venir parejas. Podría decir que tenemos un 70% de clientes que son parejas y un 30% de los clientes que nos visitan son familias”, afirma Lorena.
O Mar de Preciosa es más que un hotel, es un espacio vivo de encuentro entre visitantes y lugareños, ofreciendo servicios que persiguen generar valor social e impacto medioambiental positivo. Trabajan de la mano de mariscadoras locales de Camariñas: “Tenemos tres rutas establecidas de turismo marinero: una de ellas, en la zona del puerto; la segunda, en la zona de marisqueo y la tercera, en el entorno del faro Vilán”.
“Lo más importante de O Mar de Preciosa es que somos un modelo de empresa que trabaja en la sostenibilidad, no solo desde el punto de vista del cliente -evidentemente buscamos que el cliente disfrute de una experiencia única- pero los empleados y los proveedores son un pilar fundamental para la empresa. Facilitamos su bienestar y la conciliación con la vida personal y familiar, porque creemos que esto repercute en el éxito del proyecto en sí”, añade.