Un Calvo Escola Lubiáns que sigue estando muy limitado de efectivos, no pasó del empate (1-1) en el encuentro de la décima jornada de la OK Liga Bronce que le enfrentó a los navarros del Rochapea.
Al técnico de los locales, Carlos Loureiro, no le quedó otra que tirar de Danilo, uno de los puntales del equipo, pese a que el día anterior apenas se podía calzar los patines por las molestias que tenía tras la lesión sufrida en la pista del Jolaseta.
Al verse por detrás en el marcador, Loureiro recurrió a él para las acciones a bola parada, como una falta directa pitada a favor de los locales a falta de 4:39 para el final y todavía con 0-1 en el marcador.
El choque entre carballeses y navarros estuvo muy igualado, con los de casa muy pendientes de que los visitantes no pudiesen desplegar su veloz y contundente contraataque.
A falta de 3:15 para el descanso llegó la jugada que pudo cambiar el partido: un penalti a a favor del Escola que su goleador Eudald Cañete no logró transformar.
En la segunda mitad continuó el equilibrio de fuerzas hasta que a falta de poco más de 9 minutos llegó el 0-1 en un falta directa convertida por Daniel Gordoa, que instantes antes había desperdiciado otra.
La definitiva igualada llegaría a falta de 3:30 y fue obra de Eudald Cañete, que se desquitó así del penalti errado. Los carballeses, que no volverán a jugar hasta el 18 de enero, mantienen así la desventaja con los dos primeros– Jolaseta y Patinalón, que jugaron entre si y también empataron.
El parón les vendrá muy bien a los carballeses para recuperar efectivos.