Hay futbolistas que están nacidos para marcar goles. Los hay que encabezan tablas de artilleros y otros que no están en ese tipo de clasificaciones porque no son indiscutibles en sus equipos pero tienen una facilidad pasmosa para aprovechar sus minutos y transformarlos en goles. En el grupo 1 de Segunda RFEF, cuatro de los cinco futbolistas que mejor promedio tienen juegan en equipos gallegos: Charles y Rufo, del Pontevedra; Aarón, del Coruxo; y Antón Escobar, del Bergantiños.
El que mejor coeficiente tiene es, precisamente, Rufo. Aunque el Pontevedra fue capaz de conseguir victorias que lo situaron justo detrás del líder Unión Adarve, prescindir de los servicios de Rufo durante diez partidos es un lujo que muy pocos equipos pueden permitirse. El Pontevedra estuvo tres meses sin él por lesión, pero el delantero madrileño ha vuelto con la escopeta cargada. A sus 35 años, Rufo tiene el mejor promedio de la liga.
Sería raro que el pichichi de la liga no estuviese en la lista de mejores promedios goleadores de la temporada. Charles no ha fallado a su cita con el gol (lleva 16 en lo que va de liga) y, pese a ser uno de los futbolistas de campo que más minutos ha disputado en el grupo 1, solo necesita 129 para marcar un gol. Cumplirá 38 el próximo 4 de abril pero Charles sigue teniendo un idilio con el gol.
Aarón, futbolista coruñés de 24 años formado en las categorías inferiores del Deportivo no ha contado con muchas oportunidades esta temporada ni primero con Gonza Fernández ni en los últimos meses con Jacobo Montes. En cambio, en los 296 minutos que ha participado (solo dos partidos como titular) ha marcado dos goles: al Langreo en la jornada 6 y al Arosa en la 22.
El pichichi del Bergantiños esta temporada es el quinto jugador de la liga que mejor rentabiliza sus minutos transformándolos en gol. Gran parte de culpa de la espectacular segunda vuelta que está realizando el equipo de Lemos es gracias a sus goles. El delantero de Nigrán de 23 años marcó cuatro en los cinco últimos partidos que ha disputado.