El Berro Seco volvió a resonar con fuerza en la romería de San Fins do Castro. Tras dos años de suspensión por la pandemia, este lunes 1 de agosto se celebraba de nuevo esta fiesta popular de Cabana de Bergantiños, declarada de Interese Turístico de Galicia. 

La jornada comenzó con dianas, alboradas, y tras varias homilias, tuvo lugar la misa solemne cantada por la coral de Cesullas, en una mañana animada por la música de O Son do Castro. Después tuvo lugar el Berro Seco, una especie de aturuxo donde el público se agacha y se levanta tres veces, un ritual dirigido por el párroco Liller Alexander, que se estrenaba en el cargo en 2019, y ayer era su segundo año. Antes de la sesión vermú también se llevó a cabo la quema del Santo a Pólvora, que completaba el ritual mágico de esta romería, instaurado en su día por el párroco Saturnino Cuíñas.