Las pruebas de la Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU), la antigua Selectividad, comenzó este martes en toda Galicia para más de 13.000 estudiantes. Entre ellos se encuentran los 333 de la Costa da Morte, de los que 140 se examinan en el instituto Agra de Raíces de Cee. Allí se respiraba muy buen ambiente durante toda la jornada, aunque también eran palpables los nervios, especulaciones sobre los exámenes y los repasos de última hora de algunos estudiantes.
De hecho, antes de entrar a las pruebas algunos sostenían los apuntes en la mano y otros más relajados bromeaban sobre los exámenes, el “atracón” de los últimos días o los que optaron por tomarlo con más relax tras un curso especialmente intenso y complicado.
En el IES Agra de Raíces se examinan los alumnos de este centro, los del Fernando Blanco (también de Cee), los del Terra de Soneira (Vimianzo) y del Maximino Romero de Lema (Baio-Zas), como es habitual todos los años, mientras que los del área de Bergantiños se desplazan a A Coruña. Allí son cerca de 3.000 jóvenes que se reparten en torno a las facultades de Elviña y A Zapateira. Un accidente múltiple en la Avenida Alfonso Molina a primera provocó retenciones y complicó el acceso a la ciudad, por lo que el pánico se desató entre algunos de los alumnos que tenían no llegar a los exámenes, aunque no hubo que lamentar incidentes.
La EBAU dio el pistoletazo de salida a las 10:00 con la prueba de Lingua Galega e Literatura. El examen tuvo una duración de hora y media, aunque pasada una hora ya se podía ver a algunos estudiantes apuntes en mano para comentar la prueba o apurando el último repaso para la prueba siguiente.
Aunque las opiniones fueron muy dispares, tanto en Cee como en A Coruña, la idea más generalizada era que el examen no había sido muy difícil, es más, muchos se esperaban que fuese más complicado.
Para Claudia Roget, una vimiancesa que se examinaba en Cee, las pruebas le parecieron bastante asequibles, sobre todo tras haber superado con nota un segundo de Bachillerato muy complicado. Además del examen de Lingua, ella salió contenta del de Inglés, a pesar de que otros compañeros afirmaban que era muy complicado y eso le hizo despertar algunas dudas posteriormente. De todas formas, reconoció estar muy tranquila en esta primera jornada, en contra de lo que esperaba, y confía en seguir así en las dos restantes.
Sin embargo, para otros aspirantes el examen de Lingua Galega generó estupefacción y asombro.