La sobrecarga judicial sigue siendo uno de los principales problemas en los partidos judiciales de Carballo y Corcubión. Según los últimos datos publicados por el Consejo General del Poder Judicial, al cierre de 2024 ambos órganos sumaban un total de 6.889 asuntos aún pendientes de resolución. Esta cifra refleja no solo la elevada entrada de nuevos casos durante el año, sino también una notable diferencia entre los asuntos que ingresan y los que se resuelven, lo que impacta directamente en la saturación.
En el caso de Carballo, la situación resulta especialmente preocupante. Los tres juzgados del partido judicial cerraron el año con un total de 4.411 asuntos pendientes, una cifra que representa un incremento del 31,7% respecto al año anterior. Este aumento de la pendencia se produjo a pesar de que se resolvieron 3.791 asuntos, ya que durante ese mismo período ingresaron 4.800 nuevos casos. La consecuencia directa fue una tasa de congestión del 2,15, lo que supone un incremento de la saturación de más de un 21% en el último año. Esta tasa, una de las más elevadas de la provincia, refleja claramente la presión que soportan los órganos judiciales del municipio.
Por jurisdicciones, el área civil en Carballo fue la más afectada. Cerró el ejercicio con 3.248 asuntos aún sin resolver, frente a los 2.454 que había al inicio del año, lo que supone un incremento del 32,4 por ciento. La jurisdicción penal también mostró signos de saturación, aunque en menor medida. Los tres juzgados penales registraron un total de 2.085 asuntos nuevos en 2024, de los cuales se resolvieron 1.880, dejando un remanente de 1.163 casos sin resolver al finalizar el ejercicio. La tasa de congestión en esta área fue de 1,59, con un índice de resolución del 0,90.
En cuanto a la evolución anual, el volumen de casos ingresados aumentó un 8,2% con respecto a 2023. Sin embargo, el número de casos resueltos cayó un 9,7%, un dato preocupante que evidencia una caída en la capacidad de respuesta del sistema judicial local. Esto, sumado a un crecimiento del 31,7% en los casos pendientes, se tradujo en un deterioro significativo de la eficiencia del servicio, con una bajada del 9,6% en la tasa de resolución y un incremento del 21,2% en la congestión.
El escenario no es mucho más optimista en el partido judicial de Corcubión, donde los dos órganos judiciales cerraron el año con 2.478 asuntos en tramitación. Aunque la cifra es inferior a la de Carballo en términos absolutos, el impacto en la eficiencia operativa es considerable, ya que este partido judicial dispone de menos medios. A lo largo de 2024 se ingresaron en Corcubión 2.391 asuntos, mientras que se resolvieron 2.052, lo que dejó un saldo negativo que alimentó el crecimiento de los casos pendientes, que pasaron de 2.139 al inicio del año a 2.478 al cierre.
La tasa de congestión global en Corcubión fue de 2,21, ligeramente inferior a la de Carballo, pero aún reflejando una situación de notable saturación. La tasa de resolución se situó en el 0,86, mientras que la de pendencia fue de 1,21. En otras palabras, los juzgados corcubioneses también se enfrentan a un desequilibrio entre lo que entra y lo que se resuelve, agravado por un aumento de la carga estructural.
Por jurisdicciones, en Corcubión la jurisdicción civil acumuló 1.617 casos pendientes al finalizar el año. En este ámbito, los juzgados registraron un total de 1.345 ingresos y resolvieron 1.158 asuntos. Las cifras suponen un incremento del 13,1% en la pendencia y una tasa de resolución del 0,86. La tasa de congestión civil en este partido judicial fue de 2,40, con una tasa de sentencia de tan solo 0,26, muy por debajo de la media deseable para este tipo de órganos.
En cuanto a la evolución interanual de la actividad judicial, en Corcubión la tasa de resolución aumentó un 3,8%, mientras que la tasa de asuntos pendientes se redujo un 14,4 por ciento. La tasa de congestión mostró una mejora en Corcubión con una reducción del 8,4 por ciento en el último año. En la jurisdicción penal, los órganos de Corcubión también mostraron una evolución dispar. Aunque ingresaron 1.046 nuevos asuntos y resolvieron 894, el saldo final dejó 861 asuntos aún pendientes. En términos relativos, esto se traduce en una tasa de congestión del 1,96 y una tasa de resolución del 0,85. En este caso, la tasa de sentencia fue del 0,25 y la de pendencia del 0,96, lo que también refleja dificultades para mantener un equilibrio entre la carga de trabajo y la capacidad de resolución.
Comparando ambas circunscripciones, se aprecia que la saturación en Carballo es más acentuada, no solo por el volumen absoluto de asuntos pendientes, sino también por la evolución negativa de casi todos los indicadores clave.
El impacto de esta saturación judicial no se limita a los órganos administrativos. Aunque no se incluye en los informes, las consecuencias directas afectan a los ciudadanos, que ven cómo los procesos se alargan durante meses e incluso años. Este retraso en la administración de justicia puede tener consecuencias relevantes en procesos civiles, familiares o penales, sobre todo en aquellos vinculados a violencia de género.