A falta de un día para que acabe el año, desde el 1 de enero de 2023 las carreteras de la Costa da Morte se han cobrado la vida de una decena de personas. Seis de ellas murieron como consecuencia de otros tantos accidentes, concretamente de cinco salidas de vía y  de una colisión. Las otras cuatro víctimas fallecieron atropelladas.

El primer accidente mortal del año ocurrió a mediados de enero y en el mismo perdió la vida un vecino de A Laracha de 75 años de edad tras precipitarse al río el coche que conducía en el lugar de Lexas (Lendo) . 

Dos meses más tarde tuvo lugar otro accidente mortal, esta vez al paso de la AC-552 por Dumbría. En el percance viario, ocurrido de madrugada, falleció un conocido empresario vimiancés que regentaba un negocio de restauración en Corcubión. Era el único ocupante del vehículo implicado en la salida de vía ocurrida en el kilómetro 81 de la AC-552.

El 10 de junio fue una mujer, que viajaba como acompañante en un turismo, la que se dejó la vida en una carretera del municipio de Carnota. Falleció cuando era evacuada en helicóptero al hospital.

Nueve días más tarde un vecino de Serantes perdía la vida después de precipitarse su coche al mar en el muelle de Laxe. 

El 15 de octubre una colisión entre un turismo y un camión dedicado al transporte de animales  sumió en el dolor a dos familias de Sofán. 

A consecuencia del choque murió una mujer natural de Guitoi (Sofán), que viajaba en el asiento trasero del turismo conducido por un hijo de la víctima y en el que también iba una nieta. Ambos ocupantes también resultaron heridos a consecuencia del impacto.

El último siniestro mortal se registró hace unos días, concretamente el pasado 18 de diciembre. El coche de una vecina de Cabovilaño apareció semihundido  en el río en el lugar de A Teixoeira y a unos 200 metros de distancia fue localizado el cadáver de la conductora.

Arrollamientos

En lo tocante a los atropellos mortales, el primero ocurrió  el 28 de marzo al paso de la AC-552 por el cruce de A Gánduma, perteneciente a la parroquia larachesa de Lestón. Una mujer de 58 años fue atropellada mortalmente por un turismo conducido por un joven de 24 años que se dirigía a su lugar de trabajo, un taller que regenta un hijo de la fallecida.

 
Otro atropello igual de llamativo tuvo lugar también en Laracha el pasado 5 de diciembre. La víctima fue un trabajador de la empresa Construcciones Ponciano Nieto que estaba regulando el tráfico en la zona afectada por las obras de construcción de una senda peatonal en el tramo de la AC-552 comprendido entre Proame y Cabovilaño.

El 4 de junio un octogenario fisterrán perdió la vida en el hospital de Cee como consecuencia de la gravedad de las heridas sufridas horas antes en un atropello en la recta de Anchoa, suceso que provocó movilizaciones vecinales para exigir la mejora de la seguridad en ese punto de la AC-445.

El último atropello mortal tuvo lugar el pasado jueves día 21 de diciembre en la carretera que une las localidades de Negreira y A Pereira (Santa Comba). 

Un septuagenario vecino de la localidad xalleira de Fontecada que circulaba en bicicleta fue alcanzado por detrás por una ambulancia que transportaba a un enfermo y a un acompañante. El accidente ocurrió a escasos 50 metros de la casa de la víctima.