Más de 3.500 personas participaron entre el 15 de junio y el 15 de septiembre en las distintas propuestas ofertadas por el Museo Etnolúdico de Galicia (Melga), emplazado en Ponteceso, según los datos facilitados por la fundación que se encarga de gestionarlo.
Su director, Ricardo Pérez y Verdes, cree que pudo haber sido la mejor temporada estival en los casi once años que lleva abierto el Melga, de no mediar una serie de condicionantes, empezando por el problema de la falta de personal, que sigue pendiente de resolución.
Esa circunstancia ha obligado a recortar horarios y a cerrar el museo de lunes a viernes, de tal forma que solo estuvo a disposición de los visitantes un total de 30 días de 93 posibles.
Aún así, los datos hablan por si mismos del gran tirón que tienen las instalaciones del Melga.
En los tres meses del verano pasaron por sus salas 40 grupos para participar en visitas guiadas De esos grupos, la gran mayoría, hasta sumar más de 2.000 personas, procedían de centros escolares.
En el apartado de visitas libres se contabilizaron un total de 87 grupos procedentes de distintas partes de Galicia hasta superar las 300 personas.
Los visitantes procedentes de otras comunidades autónomas fueron unos 175 y los extranjeros, 25.
En todos los casos se trata de registros muy inferiores a los de otros años, por el motivo apuntado con anterioridad.
A ello hay que añadir los problemas de salud del propio Ricardo Pérez y Verdes, lo que provocó que el Melga no pudiese estar presente ni organizar tantos eventos como otros veranos.
Así, se promovieron tan solo tres festivales en los que acabaron participando más de 900 personas.
Pese a todos los inconvenientes, las más de 3.500 personas que tomaron parte de una u otra forma en sus propuestas lúdicas superaron en un 14,5% los registros de 2023 (2.558 personas).
En lo tocante a visitantes ilustres, cabe destacar el esgrimista olímpico coruñés Ramiro Bravo y Xabier Santxontena, director del Museo Santxotena de Álava. l